Un gesto de buena voluntad

Esta semana nuestra compañera Amudena Martínez-Fornés hace una reflexión sobre la relación de los Reyes de España con los mandatarios de Estados Unidos.

Almudena Martínez-Fornés
ALMUDENA MARTÍNEZ-FORNÉS

Los Reyes de España han mantenido una buena relación con los diez últimos presidentes de Estados Unidos, desde John F. Kennedy a Barack Obama, y don Felipe ha aprovechado la primera oportunidad para transmitir su deseo de que todo siga igual con la nueva Administración de Donald Trump.

Sin embargo, la hostilidad que el nuevo mandatario estadounidense ha manifestado hacia lo hispano –no se sabe si también hacia lo español– se lo está poniendo difícil al Rey y a las autoridades españolas. Las relaciones de los Monarcas con los mandatarios extranjeros no están determinadas por las afinidades personales, aunque la amistad ayude, sino por la defensa de los intereses de España. Prueba de ello es que cuando don Juan Carlos dirigió el famoso "¿Por qué no te callas?" al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, los dos mandatarios tuvieron que hacer después un esfuerzo diplomático para restablecer la relación en beneficio de sus países.

Durante su reinado, don Juan Carlos y doña Sofía conocieron a algunos mandatarios admirables, como el sudafricano Nelson Mandela, símbolo de la defensa pacífica de los derechos humanos, o Helmut Kolh, artífice de la unificación de Alemania tras la caída del muro. Pero también tuvieron que tratar con jefes de Estado repugnantes, como los dictadores Muamar Gadafi, de Libia, o Nicolae Ceaucescu, de Rumanía, que terminaron ejecutados por sus propios compatriotas. Aunque la Constitución establece que el Rey "asume la más alta representación del Estado español en las relaciones internacionales", es el Gobierno el que marca la política exterior y determina a quién deben visitar o recibir don Felipe y doña Letizia.

Obviamente las relaciones entre España y Estados Unidos son muy importantes por razones económicas y políticas. España quiere llevarse bien con la primera potencia del mundo, y Estados Unidos utiliza desde hace 64 años las bases militares de Rota y Morón de la Frontera, esenciales para la defensa de sus intereses.

Por ello, sería muy excepcional que Donald y Melania Trump no llegaran a conocer a los Reyes. Sin embargo, los desprecios del nuevo presidente lo están poniendo muy difícil. Trump no solo ha eliminado los contenidos en español de la web oficial y ha anunciado la construcción de un muro con México, sino que, además, ha celebrado que el Reino Unido abandone la Unión Europea. Estas tres decisiones son tres torpedos a la filosofía que defiende don Felipe: el idioma español, los intereses de la comunidad iberoamericana y el proyecto europeo.

Aun así, el Rey ha lanzado un gesto de buena voluntad a Estados Unidos y ha expresado su deseo de "seguir trabajando con la nueva Administración al mismo nivel de excelencia con que hemos venido haciendo hasta ahora". Y es que las relaciones de la Familia Real con los mandatarios norteamericanos han sido constantes desde 1962, cuando John F. Kennedy recibió a don Juan Carlos y doña Sofía. Los entonces Príncipes se encontraban en Washington de viaje de novios y los Kennedy simbolizaban la llegada de la juventud y el glamur al poder. En 1976, invitado por Gerald Ford, don Juan Carlos protagonizó el primer viaje de un Rey de España a Estados Unidos y anunció en el Congreso norteamericano su compromiso firme de que España sería una democracia.

El Rey también trató a Ronald Reagan, cuyo viaje a España provocó encendidas protestas a las que su esposa, Nancy, intentó quitar hierro arrancándose a bailar flamenco en el Teatro Real. George Bush padre compartió jornadas de caza con don Juan Carlos, y Bill y Hillary Clinton visitaron a la Familia Real en Mallorca y se convirtieron en grandes amigos. Bush hijo invitó a los Reyes a su rancho privado de Crawford en Texas, y la relación era de tal confianza que, cuando devolvieron la visita a España, don Juan Carlos saludó a su consejera de seguridad, Condoleezza Rice, con un "buenos días, arroz". Y Obama, el único presidente que ha tratado con los dos Reyes, estableció una relación de amistad con don Felipe mientras su esposa, Michelle, congenió con doña Letizia. Una escena que, hoy por hoy, resulta difícil de imaginar entre la Reina y Melania Trump.

También te puede interesar...

Primer posado de los Reyes esquiando junto a sus hijas

El Rey Felipe cumple 49 años

Otras columnas de Almudena Martínez-Fornés

21 de marzo-19 de abril

Aries

Como elemento de Fuego, los Aries son apasionados y aventureros. Su energía arrastra a todos a su alrededor y son capaces de levantar los ánimos a cualquiear. Se sienten empoderados y son expertos en resolver problemas. Pero son impulsivos e impacientes. Y ese exceso de seguridad en sí mismos les hace creer que siempre tienen la razón. Ver más

¿Qué me deparan los astros?