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S.O.S: cuñados, millennials y casados

Mi dilatada experiencia en gestión y liquidación de pseudoligues me ha permitido detectar una carencia en el mercado...

S.O.S: cuñados, millennials y casados / Maite Niebla

Miss Dramas
MISS DRAMAS

Mi dilatada experiencia en gestión y liquidación de pseudoligues me ha permitido detectar una carencia en el mercado: se necesita un diccionario que defina la naturaleza del ser humano que uno puede toparse en la jungla del amor on line con el objetivo de evitar la proyección romántica con un sujeto que no nos gusta nada, pero que las mieles de internet nos ha vendido como el amor de nuestra vida.

Ya se sabe que cada quien vende la mejor versión de sí mismo en la red, incluso existen empresas dedicadas a convertir a cualquiera en un representante del sexo masculino deseable.

Pero, a un instinto agudo como el mío, cultivado en las profundidades de las webs de contactos, no se le escapan algunos deslices que delatan la verdadera naturaleza del sujeto en cuestión.

Dado que tenemos poco tiempo, cuatro cinco fotos y muy pocas frases (y bastante esquemáticas) para hacer nuestro trabajo, hemos trabajado con palabras claves: dime lo que dices y te diré quién eres. También nos han servido algunos detalles de las fotos: dime cómo es el escote de tu camiseta y te diré si debes ir al psicoanalista.

Hagamos un repaso a las tipologías de Tinder, para empezar...

  • Si te dice... "Holi!" (en lugar de hola) y tiene las fotos tuneadas con filtros de Snapchat. Diagnóstico: es un millennial. ¡Cuidado!, puede que sea incluso menor de edad. En cualquier caso te dirá que Pretty Woman es cine clásico.

  • Si te dice... "Pues yo en tu barrio (vives en el centro de Madrid), siempre aparco a la primera. No sabéis buscar". Diagnóstico: es un cuñado. Lo sabe todo mucho antes de que suceda y sentirá la irrefrenable necesidad de explicártelo. De hecho, sabe quien mató a JFK.

  • Si te dice... "Los jueves no puedo quedar porque voy a clases de salsa y reggaeton". Diagnóstico: tiene horror vacui, no sabe estar solo, ha encontrado consuelo en el perreo. Y eso es muy grave.

  • Si te dice... "Los músculos abductores". Diagnóstico: está enganchado al gimnasio y no tiene otro tema de conversación. Eso sí, hay muchas probabilidades de que esté de buen ver.

  • Si te dice... "Cambio de planes. Mi madre quiere que la lleve al podólogo", y lo hace un viernes por la tarde. Diagnóstico: está casado. Casadísimo. Lleva regularmente una alianza aunque tú nunca la hayas visto. Para eso existe la guantera del coche.

  • Si te dice... "Haber si nos vemos, churri". Diagnóstico: ha suspendido todas las ediciones del informe Pisa. La última vez que se leyó un libro fue cuando se sacó el carnet de conducir. Su comprensión lectora es nula y no te quedará más remedio que hablar con él sin usar oraciones subordinadas.

Moraleja:

Hay que confiar en que la especie tiende a mejorar y a apuntarse a Tinder.

Cosas que hacer:

Registrar la patente de este glosario y hacer tazas de desayuno y camisetas, como Mr. Wonderful.

21 de marzo-19 de abril

Aries

Como elemento de Fuego, los Aries son apasionados y aventureros. Su energía arrastra a todos a su alrededor y son capaces de levantar los ánimos a cualquiear. Se sienten empoderados y son expertos en resolver problemas. Pero son impulsivos e impacientes. Y ese exceso de seguridad en sí mismos les hace creer que siempre tienen la razón. Ver más

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