Operación bikini: tripa y cintura bajo control

El principal objetivo que quieres cumplir es aplanar, reducir y recuperar las formas. Si te has pasado todo el invierno disimulando que tu tripa sobresale más de lo que te gustaría, ha llegado el momento de afrontar la situación con un tratamiento de choque y, sí, también unos cuantos abdominales que van por cuenta de la casa (busca un buen tutorial).

Este protocolo tres en uno, que implica masaje y envolturas, trabaja primero todo el cuerpo y luego la zona de vientre, cintura y flancos, mediante masajes enérgicos de efecto drenante con altas concentraciones de extractos botánicos.

Se deja actuar a los activos durante 40 minutos en las zonas a tratar, envueltas en una ligera capa de film osmótico. Ahí es donde entra en juego la hiperemia, “una estimulación de la circulación sanguínea que provoca un enrojecimiento de la piel que aumenta la temperatura y activa el metabolismo celular. Es lo que facilita la eliminación de toxinas acumuladas en torno a los adipocitos”, explica Ana Gallego, responsable de Bioslomming en España. Después se aplica otra envoltura fría con efecto tonificante y reafirmante, que ayuda a desinflamar y drenar.

Necesitas quemar grasa en esos flancos junto a tu cintura. Y reducir el muffin top, que asoma por encima del pantalón y las redondeces en la tripa. Los parches transdérmicos para zonas difíciles son una buena opción.

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