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“Tengo una conversación pendiente con Belén Esteban”

Con la carrera de odontología recién terminada, la mujer de Jesulín de Ubrique se centra en encontrar trabajo ‘de lo suyo’. No evita ninguna pregunta a lo largo de la entrevista y no descarta una reconciliación con la exmujer de su marido.

María José Campanario habla de la crisis entre Belén Esteban y Toño Sanchís./alberto bernárdez

María José Campanario habla de la crisis entre Belén Esteban y Toño Sanchís. / alberto bernárdez

BEATRIZ CORTÁZAR

Lleva 15 años casada con Jesulín de Ubrique. Años que han dado para mucho en la vida de María José Campanario. Licenciada en Odontología y con el Máster aprobado, ahora su objetivo es encontrar trabajo. Sin esquivar ni una pregunta, se muestra más franca que nunca. El tiempo ha sido su mejor aliado.

  • Corazón: Acaba de dejar de fumar y recurre, de nuevo, a la dieta de la alcachofa, que amadrina por tercera vez. ¿Tan pesadas han sido las Navidades? María José Campanario: No me he privado de nada. Pasamos la Nochebuena con mis padres y reconozco que he comido sin parar. Mi suerte es que me gusta de todo y, encima, con mi madre cocinando, pues ya sabes… Menos mal que tengo la dieta de la alcachofa de aliada, a la que recurro siempre para depurarme.

  • Corazón: Lleva mucho alejada de los medios e intentado tener una vida anónima. ¿Qué hay de nuevo? María José Campanario: Sobre todo dos bebés nuevos en la familia Janeiro, que nos han hecho muchísima ilusión. Este año terminé mi carrera, hice el Máster y reconozco que ha sido una etapa muy bonita. Ahora, una vez han operado a mi madre del hombro, estoy más tranquila. Ya está con su rehabilitación.

  • Corazón: Muchos no entendieron que se pusiera a estudiar la carrera lejos de su casa y con dos niños pequeños. María José Campanario: Mi caso es como el de tantas otras personas, con la diferencia de que, al ser la mujer de Jesulín, tengo una proyección pública. Reconozco que no ha sido fácil ni para mi marido ni para mí, pero por suerte ya se acabó. Hubo un momento en el que decidí parar cuando estaba estudiando en Barcelona y apenas podía ver a mi familia. Decidí cambiar de lugar, porque quería terminar y reconozco que me da satisfacción. También me gusta tener metas, porque, de otra manera, la vida sería mucho más aburrida. Eso no quita que me encante estar en mi casa, cocinar con mi hija y disfrutar de mi familia, aunque de la misma manera necesito mi espacio, tiempo en soledad.

  • Corazón: Después de cinco años entrando y saliendo de casa puede que eche de menos la vida de estudiante. María José Campanario: Desde luego echaré de menos a mis compañeros, aunque a algunos los pueda ver. Es cierto que te acostumbras a estar un tiempo fuera de casa, pero te aseguro que, en los últimos meses, cada vez me costaba más. Eran periodos de unos 10-15 días que se me hacían demasiado largos.

  • Corazón: Ahora busca trabajo como odontóloga. María José Campanario: Primero estoy arreglando los papeles, ya que en Portugal, sí podría empezar ya, pero en España tengo que convalidar el título con Sanidad. He recibido alguna oferta para trabajar en una clínica y estoy deseando, pero también tendré que seguir estudiando porque, en estas profesiones, siempre hay que estar aprendiendo y reciclándose.

  • Corazón: Después de 15 años casada con Jesulín se puede decir que ya llevan una larga travesía juntos. María José Campanario: Estamos en un momento muy tranquilo. Con sus ratos buenos y malos. Nos conocimos muy jóvenes y nos hemos hecho mayores juntos. Ahora estamos centrados en mis pruebas médicas para saber realmente qué me ocurre. El desmayo que sufrí hace meses dicen que no tiene nada que ver, porque soy propensa a las lipotimias, pero tengo un problema que me genera un proceso inflamatorio que me provoca dolores muy desagradables. Eso es lo que están investigando.

  • Corazón: Con dos sobrinos más en la familia –los hijos de Humberto y Víctor Janeiro–, ¿le entran ganas de tener más hijos? María José Campanario: Cuando los coges te entran muchas ganas, pero no lo tengo claro. A mis 37 años sé que aún tengo un margen para ser madre, pero acabo de terminar la carrera y ahora me ilusiona trabajar. Lo que no me gustaría es, el día de mañana, arrepentirme de no haber tenido un tercer hijo. A Jesús le encantaría, porque adora a los niños. Y mi hija no para de repetirme que tenga un bebé.

  • Corazón: Meses atrás se comentó que mantenía una amistad especial con un dentista portugués. ¿Cómo le afectaron estas informaciones? María José Campanario: Lo pasé mal. Sobre todo por la otra parte, porque para mí no era más que una anécdota absurda. Hoy tengo puestas varias demandas y espero el juicio para saber de dónde surgieron esas historias. A ese señor le he visto dos veces en mi vida. No fue compañero de estudios y todo vino por una foto en la que aparecía con mi marido.

  • Corazón: Cambiando de tema, supongo estará al tanto de la ruptura entre Belén Esteban y Toño Sanchís. ¿Cree que él ha influido negativamente en la relación que han tenido Jesulín y usted con Belén? María José Campanario: Mi opinión es que sí. Ese señor dijo de mi familia que eran unos indeseables, por eso piensa que es de los que más suciedad ha metido en nuestra relación. Creo que le convenía. Esto lo he dicho en más de una ocasión. Ahora se está demostrando quién es él. No sé lo que pensará de esto Belén, pero yo lo considero así.

  • Corazón: ¿Tiene una conversación pendiente con ella? María José Campanario: Sí, me gustaría tener una conversación. No sé si ella lo necesita, pero me encantaría poder aclarar muchas cosas, ya que considero que le han malmetido con muchas historias falsas que nunca nadie dijo. Me daría mucha pena que eso haya supuesto una pérdida de tiempo irreparable en temas más delicados.

  • Corazón: Supongo que se refiere al tiempo que no ha estado Jesulín con su hija Andrea. Ahora parece que hay más fluidez. María José Campanario: Sé que hablan por teléfono, de la misma manera que mi hija lo hace con su hermana. Tienen aficiones comunes y suelen comunicarse. Estoy muy contenta de que las cosas empiecen a ir por este camino

  • Corazón: Parece que una vez más son los hijos los que arreglan los problemas que sus padres no han solucionado. María José Campanario: Me encantaría que nos dieran esa lección, porque deseo que la relación entre los hermanos sea más asidua. Pienso que, a medida que cumplan años, se irán acercando más. Ahora que no estudio, tengo más tiempo para poder venir con mis hijos a Madrid y que no sea siempre la niña la que tenga que desplazarse.

  • Corazón: Como en el caso de Ana Obregón y Antonia Dell’Atte, a ustedes también les unen sus hijos. ¿Ve una reconciliación? María José Campanario: Sí, pero en lugar de posar en un reportaje, veo más factible que un día nos tomemos un café. Pero desconozco lo que ella opina.

  • Corazón: ¿Sabe perdonar? María José Campanario: Hay cosas que me han hecho mucho daño y no puedo olvidar, pero tampoco soy capaz de arrastrar toda la vida el rencor. Insisto en que ha habido mucha gente empeñada en ensuciar la relación. En su día hice terapia para poder llevar estos asuntos y, cada vez que lo he necesitado, he recurrido a la ayuda de profesionales.

  • Corazón: Hoy, por suerte, se encuentra bien María José Campanario: Mi lucha hoy es levantarme por la mañana sin fuertes dolores y acabar con las pruebas para saber qué me pasa.

21 de marzo-19 de abril

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Como elemento de Fuego, los Aries son apasionados y aventureros. Su energía arrastra a todos a su alrededor y son capaces de levantar los ánimos a cualquiear. Se sienten empoderados y son expertos en resolver problemas. Pero son impulsivos e impacientes. Y ese exceso de seguridad en sí mismos les hace creer que siempre tienen la razón. Ver más

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