La ‘brava’: la palabra que Choví y los bares quieren llevar al diccionario (y que ya forma parte de nuestra vida gastronómica)
En cada mesa compartida, en cada ración improvisada y en cada tarde de terraceo, la salsa brava está ahí: icónica, reconocible y muy nuestra. Por eso Choví y los bares de España han unido fuerzas para pedir a la RAE que la incluya en su diccionario.
En nuestro país hay palabras que se entienden sin que hayas que explicarlas. “Una caña”, “lo de siempre”, “ponme otra”. Es prácticamente un idioma común que comparte cada bar, taberna o gastrobar español. Y luego está esa otra palabra que prácticamente ha nacido en las barras: brava. Da igual si el local tiene carta en papel o QR, que pedir unas patatas bravas es algo universal. Algo tan nuestro, tan autóctono, que sorprende que la Real Academia Española de la Lengua todavía no haya incluido este término con su acepción gastronómica en el diccionario.
Para que la RAE reconozca ‘brava’ como salsa, Choví, la marca valenciana líder en salsas y referente en allioli, ha decidido dar un paso al frente y presentar una petición formal a través de change.org. Y lo hace de la mano de los bares de España, los verdaderos embajadores de esta salsa. Son ellos los que, día tras día, la sirven en sus cartas, en sus mesas y en la memoria colectiva de quienes la disfrutan. Locales de todos los rincones del país como La Campana (en Madrid), La Cantona o Cervecería Abastos Tito (en Valencia), Club de golf de Terramar (en Sitges), Bar Jardín Cordobés (en Viladecans) o Pizzería La Font (en Barcelona) se han unido a la iniciativa para demostrar que la palabra brava ya existe en el diccionario de la calle: las cartas de los bares.
Una causa muy brava: unidos por la salsa más castiza
«Los bares son quienes han mantenido viva la brava, quienes la sirven con orgullo y la han hecho parte del lenguaje popular. Esta petición nace de ellos y de todas las personas que, al pedir unas bravas, entienden perfectamente a qué se refieren», asegura Agustín Martiño, Business Director de Choví. Y añade: «Queremos que la RAE reconozca lo que millones de españoles ya saben: que la brava no es solo una salsa, es parte de nuestra cultura gastronómica».
La iniciativa impulsada por la conocida marca valenciana lucha por cumplir los distintos criterios que la RAE exige para incluir esta nueva acepción de “brava”. Entre ellos se encuentra este uso extendido geográficamente, pero también intergeneracional. Y para demostrar este último punto, Choví ha unido a dos generaciones, diferentes aparentemente, pero unidas por una misma causa, la salsa Brava.
“La brava no es solo una salsa, es parte de nuestra cultura gastronómica”. Agustín Martiño, Business Director de Choví
Choví cuenta para ello con unos embajadores de lo más representativos que animarán a los españoles a unirse a esta petición. Por un lado, los rostros famosos de la televisión, Cañita Brava y Agustín Bravo; y por otra parte una selección de famosos influencers como Montoya, Darío Eme Hache o Linguriosa, referentes del público joven, que invitarán a sus comunidades a sumarse a la campaña en Change.org y a compartir este mensaje con humor y sabor.
Defendiendo el valor cultural de las bravas
Con esta acción, Choví y los bares de España reivindican el valor cultural de algo tan cotidiano como unas patatas bravas y lanzan un mensaje que busca llegar tanto a la Real Academia Española como a los corazones (y los estómagos) de todos. Y es que si se sirve, se dice. Y si se dice, merece estar en el diccionario.
La petición ya puede firmarse en Change.org y se irá actualizando con nuevos apoyos del sector hostelero en las próximas semanas.