Semillas de amapola, un tesoro nutricional que debes comer todos los días y ayuda con las digestiones

Vale, has decidido seguir una dieta equilibrada y tienes controlado lo que te puede aportar cada alimento: desde las verduras y frutas hasta las carnes, los pescados y los frutos secos. Pero es que la cosa no acaba ahí. Existen unos alimentos pequeñitos que son una bomba nutricional para tu organismo. Se trata de las semillas y cada vez las incorporamos más a nuestra dieta, sobre todo las más conocidas, como la chía o el lino, pero también otras menos extendidas como el kalonji. Hoy vamos a hablarte de las propiedades de otra semilla que es probable que hayas encontrado en alguna barra de pan especial o en uno de esos sandwiches riquísimos que compras en las tiendas especializadas. Se trata de las semillas de amapola y, además de dar una textura muy especial a los platos, son un tesoro nutricional. Y no lo digo yo, lo dice la OMS.

Las semillas de amapola se extraen del interior de la cápsula de la amapola, donde también puede obtenerse en algunas especies el opio y los alcaloides derivados del mismo como morfina, codeína… ¿quiere decir eso que si las consumes estás consumiendo droga? No, ya que aunque pueda contener trazas, su concentración es tan pequeña que no te causará problemas a no ser que estés embarazada o seas lactante, que no están recomendadas para el bebé. Por el contrario, están muy recomendadas para los deportistas debido a su aporte de minerales como calcio, magnesio, hierro, fósforo, antioxidantes, aminoácidos y ácidos grasos esenciales y para dietas vegetarianas y veganas.

Su mayor nutriente es la grasa, por lo que es muy energética y se trata de grasa mayoritariamente poliinsaturada con mayoría de omega-6, un gran aporte de omega-9 también y algo menos de omega-3. Además aporta proteína de muy buena calidad al contener todos los aminoácidos esenciales sin contener ninguno limitante.

Su contenido en fibra es alto y además aporta vitamina B1 y ácido fólico. También aporta algo de vitamina C y una buena dosis de vitamina E. En cuanto a su contenido en minerales destaca su contenido en calcio más alto incluso que el que contiene el sésamo y la leche.

Contiene también gran cantidad de fósforo, hierro, potasio, magnesio, manganeso, cobre, zinc y selenio. Una cucharada puede proporcionar el 25% de las necesidades diarias de manganeso, el 16% del cobre, el 10% del calcio y en torno al 6-7% del magnesio, el fósforo, el zinc, el hierro y la vitamina B1.

- Previenen las enfermedades cardiovasculares: su alto contenido en grasas poliinsaturadas ejerce un efecto protector ante enfermedades cardiovasculares. Los omega-3 y la fibra reduce los niveles de triglicéridos, colesterol total y colesterol malo (LDL) en sangre. Los omega-9 favorecen el aumento del colesterol bueno (HDL). Los omega-6 por su efecto antiinflamatorio y antiagregante plaquetario mantiene la salud arterial favoreciendo el control de la tensión arterial. La vitamina E y los antioxidantes minerales (selenio, cobre y zinc) evitan la oxidación de las placas de ateroma de las arterias.

- Regulación del tránsito intestinal: su aporte de fibra colabora en regular el tránsito intestinal en estreñimiento.

- Fortalece del sistema inmune: el aporte de zinc y selenio y los ácidos grasos esenciales colaboran en la regulación del sistema inmune.

- Reduce el riesgo de sufrir osteoporosis y dolores musculares: su contenido en fósforo hace que el calcio que contiene se absorba y se deposite en los huesos remineralizándolos. El aporte de magnesio y potasio impide calambres y dolores musculares pudiendo ser útil su consumo en fibromialgias.

- Reduce las anemias: el aporte de hierro, combinado con vitamina C y ácido fólico hace que sea un alimento muy recomendable para reponerse de anemias ya que el hierro mejora su absorción con la vitamina C y el ácido fólico también interviene en la producción de los glóbulos rojos.

- Efecto sedante: las infusiones de amapola contribuyen a la conciliación del sueño por su contenido en alcaloides opiáceos. Pueden hacerse infusiones con una cucharadita de semillas y tila, valeriana, melisa… si se infusionan con pétalos de amapola el efecto sería mayor.

- Síndrome premenstrual: su aporte de omega-6 reduce los síntomas asociados al síndrome premenstrual como hinchazón, dolor mamario, decaimiento anímico…

- Afecciones de la piel: los omega-6 y la vitamina E como antioxidante mejoran problemas de la piel como psoriasis, eczemas, atopías… el zinc actúa comoseborregulador mejorando el acné.

- Retrasa el envajecimiento: contienen una alta cantidad de antioxidantes por lo que su consumo contribuye a retrasar el envejecimiento celular.