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Convierte tu currículum en trending topic

Hoy, encontrar trabajo es una hazaña... digital. Para que tu perfil destaque entre millones, hay que saber moverse en las redes, resaltar tus fortalezas, hacer contactos y cuidar los detalles. ¿Lista para ser una candidata viral?

Cómo hacer un currículum perfecto. / getty

Beatriz González
BEATRIZ GONZÁLEZ

Desde hace tres meses, Alejandra comienza cada mañana con la misma rutina: enciende el ordenador y se lanza a buscar empleo en la red. Las estadísticas dicen que le quedan 12 meses más repitiendo a diario esta rutina hasta que lo logre: los españoles tardamos, como media, 17,5 meses en encontrar trabajo según el estudio Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo. Sin embargo, los expertos aseguran que con la estrategia adecuada es posible reducir ese lapso de tiempo.

Se trata de estar en el momento justo, en el sitio adecuado y con el currículum perfecto preparado. Pero, para que esos tres factores se den al mismo tiempo, sentarse a esperar sirve de muy poco. "Hay que saber moverse en internet", advierte Mariana Spata, national business manager de Hays, una multinacional de selección de personal cualificado y mandos directivos. Y su opinión coincide con la de otros expertos del sector: internet es el espacio en el que reclutadores y candidatos se encuentran. Y para que ese match entre unos y otros llegue a producirse, es necesario seguir ciertas estrategias para que la búsqueda de empleo sea una carrera corta y no una odisea interminable.

Imaginación, sí: extravagancia, no...

"Viralizar" es la palabra mágica. Y, aunque no es tarea fácil (algo en lo que coinciden todos los departamentos de recursos humanos que hemos consultado), es la forma de lograr que nuestros potenciales empleadores -y muchos otros- vean nuestro currículum. David Heredia lo consiguió en 2012, con un vídeo que empezaba con la frase del creativo publicitario William Bernbach: "Los principios perduran. Las fórmulas no". En aquel entonces, el videocurrículum era una rareza, lo que le garantizaba cierta atención. Pero, además, Heredia hizo que fueran sus abuelos quienes vendieran las excelencias del nieto publicista, al que definían como "una bella persona", "que no tiene vicios" y "más listo que el hambre". El clip arrancó más de una sonrisa, pero, sobre todo, demostró su talento como creativo, que era de lo que se trataba.

No ha sido el único en hacer alarde de originalidad al buscar oportunidades laborales. Javier Muñiz, un ingeniero informático, transformó su currículum en un juego de ordenador donde iba narrando su experiencia laboral. Se hizo viral. Nuria Fusté, una profesora, mostraba sus aptitudes en un vídeo que usaba como excusa una receta de galletas: el clip tiene, de momento, más de 268.000 visitas.

Sin embargo, no todo se centra en fórmulas originales y creativas. La herramienta básica para presentarnos a un empleo sigue siendo el currículum de toda la vida, solo que ahora, en lugar de un papel, es un archivo PDF.

Las webs específicas de tu sector son más útiles que los portales de empleo generales.

Y en él hay que evitar fallos que cierran puertas automáticamente: el exceso de informalidad o los patinazos ortográficos o gramaticales son, según los especialistas en recursos humanos, una catástrofe. "Son motivos habituales por los que los currículos acaban siendo descartados", explica Iria Vázquez, directora de Servicio y Calidad de Adecco, quien añade que tampoco es buena idea pasarse de originales con, por ejemplo, una tipografía inusual. "Lo más importante es distinguirse por el contenido y no por la extravagancia. A menos que te dirijas a una empresa de diseño, mantén un formato sencillo, moderno y que facilite la lectura rápida", aconseja. Un dato curioso: según la plataforma TalentWorks, si mandas tu currículum entre las seis y las diez de la mañana, quintuplicarás las probabilidades de lograr una entrevista.

Otro punto clave es ponerse en el lugar de los potenciales empleadores e introducir las palabras clave por las que podrían encontrarnos en internet. "Igual que quienes buscan empleo, los reclutadores usamos la red -comenta Mariana Spata-. Es importante incluir la empresa en la que has trabajado, el puesto que has desempeñado y cuatro o cinco palabras claves que te identifican como experto en esa área. No sirve de nada estar en internet si no pueden encontrarte". También es importante añadir lo que hace único nuestro perfil respecto al de otros candidatos: una estancia en otro país, un tercer idioma o un proyecto exitoso en otra empresa, como muestra de buenos resultados.

¿Un blog de cocina?

¿Qué pinta un blog de repostería en ese currículum que vas a enviar a una empresa de ingeniería aeronáutica? Puede que nada, o puede que todo. Los reclutadores creen que, aunque no tenga que ver con nuestro trabajo, puede ser buena idea incluir un enlace a dicho blog en el currículum o mencionarlo en la entrevista personal. Porque habla de nosotros, nos humaniza y sirve para que el departamento de recursos humanos se haga una idea de lo que nos motiva. Además, nos da visibilidad, muestra algunos de nuestros conocimientos y, si escribimos en él con regularidad, da pistas sobre nuestra constancia.

Sin embargo, nada de lo anterior sirve de mucho si no presentamos ese currículum perfecto donde deberíamos. Y es aquí donde podemos intervenir para pasar tres semanas, en lugar de tres meses, buscando empleo. La primera duda es común a todos los buscadores de trabajo: ¿qué es más efectivo, afinar la búsqueda o estar en todos los portales de empleo y mandar currículos a cuanta oferta veamos? Los expertos se posicionan a favor de lo específico. "Siempre es positivo participar en foros digitales donde se habla de los temas en los que estamos especializados", dice la experta en marketing digital Natalia López Papiol. Según ella, hay muchos espacios dedicados a la búsqueda de trabajo, especializados en ciertas áreas. "Y es ahí donde las empresas que están reclutando personal concentran sus esfuerzos", dice.

Cuida tus redes sociales aunque no busques trabajo con ellas: las visitarán.

Sabe de lo que habla. Con un largo recorrido en firmas líderes en tecnología, Natalia López Papiol es directora general de The Trade Desk, una empresa tecnológica de Sillicon Valley que acaba de instalarse en España. Su campo, la publicidad programática, conecta oferta y demanda, y es precisamente uno de los medios utilizados para que las empresas encuentren al candidato perfecto. De hecho, esta compañía ha encontrado a parte de su plantilla usando la misma tecnología de anuncios on line que ofrece a sus clientes. Aunque reconoce que también han descubierto muy buenos candidatos a través de una de las redes sociales en las que es imprescindible estar, según los expertos: LinkedIn.

Tejiendo la red

Tener actualizado el currículum en esta plataforma es básico. Como recuerda Iria Vázquez, "permite contactar con muchas personas que, antes o después, pueden ofrecerte esa oportunidad laboral que necesitas". Ella recomienda hacer un listado con las empresas en las que nos gustaría trabajar, seguirlas en las redes para estar al tanto de sus novedades y establecer contacto con empleados suyos. No desesperes si no todos aceptan tu invitación. "Lo habitual es que de cada 10 personas contactadas respondan dos", dice.

Las redes profesionales no son el único aspecto que debemos cuidar. Según Mariana Spata, es habitual buscar en otros lugares el perfil de un candidato encontrado en Linkedin. "Twitter no es un medio tradicional para buscar talento, pero sí sirve para completar tu imagen del candidato -comenta-. En su timeline puedes identificar habilidades difíciles de plasmar en un currículum". Las redes sociales pueden ser una extensión de nuestro perfil profesional, incluso si no buscamos trabajo a través de ellas. Y es algo que solemos pasar por alto.

"Vivimos en un mundo en el que la huella digital tiene mucha importancia y su contenido influye a la hora de tener una visión más amplia del candidato", recuerda López Papiol. Ella recomienda cuidar la presencia en internet como si fuera una plataforma de publicidad abierta que puede ser comprobada, analizada y estudiada en cualquier momento por terceras personas. Si quieres mantener una imagen profesional en una red social, elige bien el grado de privacidad que asocias con cada comentario y fotografía.

Este cuidado hay que tenerlo también si nuestras vacantes de empleo no suelen aparecer en la red. Según un estudio de Lee Hecht Harrison, división del Grupo Adecco, tres de cada cuatro ofertas en España están en el llamado mercado oculto: no se publicitan y se cubren a través de intermediarios o recomendaciones. Ocurre especialmente en puestos directivos e, incluso en esos casos, las redes sociales siguen importando: "Aunque tengamos buenas referencias, los headhunters queremos ver cómo son esas personas antes de contactar con ellas", explica.

Por eso es un error descuidar la imagen en redes y no actualizar el currículum en las plataformas profesionales: podríamos estar perdiendo la oportunidad de nuestra vida. Hay muchísimos directivos que no desarrollan bien su presencia en plataformas profesionales como LinkedIn porque, en su nivel, se les busca para un puesto por su reputación en el mercado, no por su perfil en internet. Pero, aun así, lo localizaremos en esas redes. Por eso siempre es buena idea tener actualizado tu perfil. A cualquier nivel, conviene tener una presencia impecable en internet".

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