Una juez denegó la protección a las víctimas de Castellón

Separados, Ricardo e Itziar compartían la custodia de sus hijas. En febrero, tras una discusión al intercambiarse a las pequeñas, ella le denunció por amenazas y pidió una orden de alejamiento. La Fiscalía sí apoyó la medida de protección, pero la juez, especializada en violencia de género, rechazó la petición. La magistrada no apreció una situación objetiva de riesgo porque él no tenía antecedentes penales y porque el miedo que la exmujer decía sentir no se correspondía con que hubiera fijado su residencia en la misma calle en la que vivía su exmarido. También tuvo en cuenta la juez que la policía valorara como bajo el riesgo al que estaba expuesta la denunciante. Itziar recurrió la decisión judicial, pero mientras se tramitaba el recurso, desistió de seguir adelante y se archivó la causa. También el juzgado de violencia sobre la mujer de Castellón abrió otro procedimiento tras recibir el parte de un médico que atendió a Itziar por una crisis de ansiedad después de que su exmarido golpeara el carrito de bebé contra la pared, sin la niña dentro. Ella no declaró y también se cerró la causa. Ayer Ricardo, en paro y agobiado por su situación económica, mató a sus dos hijas.-Redacción-