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Misteriosa y alejada de los focos: así es Yang Huiyan, la mujer más rica de China

Es heredera de una fortuna, pero poco tiene que ver con una Paris Hilton. Yang Huiyan, la mujer más rica de China, es más del estilo de Sandra Ortega, la primogénita del imperio Zara. Tan discreta que casi no hay fotos de ella.

Pincha en la foto para ver la evolución del estilo de Melania Trump a lo largo de los años./FACEBOOK

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Sergio Muñoz Romero
SERGIO MUÑOZ ROMERO

Existen pocas fotos públicas de Yang Huiyan, la mujer más rica de China. Tan pocas, que en los medios siempre aparecen las mismas: un retrato de cuando estudiaba en la Universidad de Ohio, algún primer plano en redes sociales y unas instantáneas del día de su boda. Yang Huiyan es muy reservada, siempre lo ha sido, y se saben pocas cosas de su vida privada, a pesar de que su fortuna la coloca permanentemente delante de los focos. Según el último ranking de los multimillonarios de 'Forbes', Huiyan, de 39 años, acumula una fortuna de 25.300 millones de dólares, lo que la convierten no solo en la mujer más rica de China, sino también en la más acaudalada de todo el continente asiático. Su forma de ser y su riqueza puede tener un lejano 'alter ego' en Sandra Ortega Mera, la mujer más rica de España. La primogénita de Amancio Ortega, dueño de Inditex, es también alérgica al foco mediático.

La fortuna de Yang Huiyan es heredada. Posee el paquete de acciones mayoritario (el 57%) del grupo inmobiliario chino Country Garden Holdings. La compañía, hoy un imperio, fue fundada en 1992 por su padre, Yang Quoqiang, un hombre hecho a sí mismo: trabajó como granjero y albañil antes de fundar la compañía.

Hoy, la firma es uno de los ‘real estate’ más grandes de la provincia china de Guangdong y va viento en popa: en enero de 2018, la subida de las acciones de Country Garden le hicieron ganar a Yang Huiyan más de 2 millones de dólares en solo cuatro días. En realidad, todo el sector inmobiliario en China (al menos, antes de la crisis del coronavirus) va viento en popa. En el país asiático, el aumento del precio de los inmuebles ha provocado que la mayoría de los chinos no puedan ni soñar con tener una casa en propiedad.

En 2007, Quoquiang transfirió Country Garden a su hija, que por aquel entonces tenía 25 años, justo antes de la salida a bolsa de la compañía en el mercado de valores de Hong Kong. «Es mi familia y tengo fe en ella», comentó. Ese año fue la primera vez que Yang Huiyan aparecía en lo más alto del ranking de las mujeres más ricas de China.

Trabajadora desde la adolescencia

Pero hay que ser justos: Yang no es una heredera ociosa y fiestera al estilo de Paris Hilton. Ni se ha dedicado al arte en vez de al negocio familiar, como Alice Walton, la mujer más rica del mundo. Siendo solo una adolescente, su padre ya la llevaba a las reuniones de los consejos de administración de la compañía. Y cuando la joven se marchó a estudiar a Estados Unidos (es graduada por la Universidad de Ohio), la obligaba a trabajar a tiempo parcial para cubrir parte de sus gastos y de su matrícula universitaria.

En 2006, la empresaria se casó con Chen Chong, que ahora tiene 41 años. Al parecer, la pareja se conoció a través de una cita a ciegas. En la actualidad, Chong también forma parte del consejo de administración de Country Garden Holdings.

Pero el imperio de Yang Huiyan va más allá del sector inmobiliario. La empresaria también preside Bright Scholar Education Holdings, la mayor compañía de educación primaria internacional y bilingüe de China. Una institución en la que estudian los retoños de la élite china y que cotiza en la Bolsa de Nueva York. Por cierto, que Huiyan también es bilingüe: antes de marcharse a estudiar a Estados Unidos, su padre contrató a una nativa inglesa para que compartiera con la familia el tiempo libre y las comidas. El objetivo era que Yang mejorase su nivel de inglés.

21 de marzo-19 de abril

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