La receta del éxito de Gita Gopinath, la primera economista jefa del FMI

El 14 de abril, en un discurso desde el atril del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath fue la encargada de colocarnos frente a las consecuencias económicas de la pandemia provocada por el coronavirus. “El Gran Confinamiento se ha convertido en la peor recesión desde la Gran Depresión, dejando muy atrás la crisis financiera mundial”. Teniendo en cuenta que cualquier declaración que llega desde tan elevados despachos tiene una repercusión planetaria, estas palabras podrían parecer carentes de tacto. Pero Gopinath sabe de lo que habla: desde 2019 es la economista jefe del organismo, la primera mujer en el cargo. Y desde 2005 es profesora permanente del departamento de Economía de Harvard. Una de las cinco únicas mujeres en un claustro formado por 43 docentes.

El viaje personal de Gita Gopinath, nacida en Calcuta en 1971, es fascinante. A los siete años, su padre, TV Gopinath, que lidera un colectivo de granjeros, la enseñó a multiplicar con verduras en la mesa de la cocina. India no es un buen lugar para nacer mujer, pero su familia era distinta. Originarios del estado de Kerala, un tradicional matriarcado, sus padres siempre alentaron a Gita y a su hermana Anita, hoy ingeniera civil. Pero la pequeña era diferente. Se le daba bien el atletismo, aunque lo dejó a los 12 años porque quería llegar lejos: “En deporte, en un país como India, o eres número uno o no sirve de nada. Sin embargo, en la universidad, si eres de los primeros, puedes hacer grandes cosas”, le dijo Gita a su progenitor. Dicho y hecho. En su expediente figuran las universidades de Nueva Delhi, Washington y Princeton.

Aunque ahora en el FMI su agenda es endiablada, ella no olvida llamar cada noche a su madre, que vive en India. “Mi hija es solo mi bebé, aunque el mundo la ve hoy como una celebridad”, ha dicho su progenitora.