Seis famosas con problemas de tiroides (y los síntomas que les hicieron sospechar que algo iba mal)

Ser vegano es un modo de vida, que implica mucho más que la visión reduccionista de aquellos que los describen como "esos que no comen carne". Las personas que practican el veganismo lo tienen claro y lo saben muy bien, pero los que desconocen esta filosofía es probable que no sepan que existen muchos alimentos aparentemente veganos, que en realidad no lo son. Descubre por qué con esta breve descripción.
La manzana roja encerada, esa que parece tan bonita y lustrosa en la frutería está rociada con una cera resinosa que se usa como antiaglomerante y que contiene el agente de recubrimiento E-904. Este se extrae de los excrementos de los llamados "gusanos de la laca". Para conocer la procedencia de algunos de estos agentes, es útil consultar la web Aditivos Alimentarios.
Suelen llevar gelatina animal, que se extrae de la piel y huesos del cerdo o de otros animales. Existen otros ejemplos, como el aditivo E-631, un potenciador del sabor derivado de extractos de pescado o carne, o el E-161b, que puede extraerse del huevo. Es ilustrativo un corto de la periodista Alina Kneepkens que se ha hecho viral llamado 'La trayectoria de una gominola' ("De weg van een snopje") en el que explica, de atrás hacia adelante cómo se elaboran las gominolas con gelatina animal. Además, algunas contienen el colorante E-120, que se consigue aplastando el insecto cochinilla, según explican en la página Aditivos alimentarios. Las gominolas veganas se elaboran con pectina o el agar agar.
Es frecuente que parte del alcohol de algunas bebidas alcohólicas sea fermentado o clarificado con ingredientes de origen animal como gelatina, albumina de huevo o cola de pescado. Para saber si una marca es vegana o no puedes consultar la web Barnivore.
Algunas marcas de preservativos o condones incluyen caseína en su composición, pues se combina con el látex. La caseína es una proteína que viene de la leche. Además, algunas marcas experimentan con animales. Marcas como ON (mercadona), Consum, Einhorn, RFSU, Glyde y RFSU no incluyen derivados animales ni experimentan con ellos.
Algunos de estos productos, no todos, contienen gelatina elaborada a base de pezuña del cerdo para darle un mejor sabor.
Al igual que sucede con las gominolas, en la elaboración de algunas mermeladas de color rojo se utiliza el E-120, que se consigue aplastando el insecto cochinilla. Es el que da ese color rojo o rosa vivo que vemos en algunas mermeladas.
Aunque sea algo frecuente que les pongan la etiqueta de 100% naturales, pueden aparecer entre sus componentes algunos agentes químicos y conservantes derivados de los ácidos grasos Omega 3, es decir, obtenidos del aceite del pescado.
Algunas tortillas de maiz industriales que se usan para elaborar las fajitas mexicanas pueden contener manteca. Y en algunas marcas incluyen el estabilizante E-920, que se obtiene industrialmente por hidrólisis de pelo y queratina (origen animal).
Algunas de las patatas fritas de bolsa que consumes están elaboradas con grasas de origen animal, por lo que no son aptas para tu dieta vegana.