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5 pasos para tu rutina de mañana que notarás en 30 días

Esta es la rutina de mañana más saludable que podemos ofrecerte para retomar tus buenos hábitos y empezar bien el año.

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Tamara Izquierdo
TAMARA IZQUIERDO

Levantarse de la cama con energía puede parecer una auténtica quimera, pero podemos darte las claves para aumentar el bienestar físico y mental, la concentración e incluso la productividad de tu día a día en muy poco tiempo. Toma nota de estos sencillísimos tips que darán un nuevo impulso a tu vida mejorando tus mañanas y apuesta por una vida saludable.

Qué difícil es organizarse bien para que por las mañanas no reine el caos. Las prisas, el estrés y una mala gestión del tiempo terminan pasándonos factura y surgen los conflictos emocionales e incluso las secuelas físicas a causa de estos desequilibrios. Lo ideal es mantener una buena rutina de mañana que no solo facilite y agilice nuestra salida de casa, sino que nos permita disfrutar del comienzo del día llenándonos de energía y también de vitalidad.

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1. No aplaces el despertador

Lo sabemos, poner varias alarmas separadas en tramos de cinco minutos suele ser la realidad de muchas de nosotras por las mañanas y la batalla contra la pereza es una constante, se está muy bien entre las sábanas y cuesta mucho trabajo arrancar. En lugar de posponer tu despertador sin fin, intenta levantarte unos minutos antes, con este pequeño cambio en tu rutina matutina vas a conseguir salir de casa en calma, sin olvidarte nada, con mejor aspecto y de mejor humor. Un truco para dejar de odiar la alarma y hacer más fácil este primer paso es cambiar el tono que tengas asignado en el móvil, elige una música que haga que despiertes de una forma más suave, una melodía que te inspire, te haga sonreír, te relaje o llene de energía, tú eliges pero ¡sal de la cama! Una vez superado este punto los otros cuatro te aseguramos que serán pan comido.

2. Despierta cuerpo y mente

Resiste la gran tentación de mirar redes sociales o correo electrónico nada más despertar que solo te distraerá y añadirá más estrés a tu mañana, en vez de eso regálate unos minutos de tranquilidad. Respira de forma consciente, concédete unos instantes para volver a conectar con tu cuerpo y realiza algún ejercicio suave como el yoga. Si no sueles practicar yoga unos estiramientos son también una buenísima opción para comenzar el día con menos tensiones. Una vez que hemos despertado el cuerpo una práctica muy recomendable para comenzar el día con más vitalidad y equilibrio es la meditación. Realizar tan solo 5 minutos de meditación te aportará claridad mental y calma para afrontar el resto del día. Todo ello no te llevará más de 10 minutos y sin embargo el beneficio que se obtiene de estos pequeños gestos se puede sentir durante todo el día.

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3. Bebe agua en ayunas

Uno de los grandes secretos de belleza, y de salud, de las mujeres japonesas es beber agua nada más levantarse. Lo ideal es beber cuatro vasos en ayunas pero comienza poco a poco para ir habituándote a este método asiático. Ingiriendo tan solo un vaso de agua al despertar ya podrás beneficiarte de sus bondades ¿Qué se consigue bebiendo agua en ayunas? Borra la sensación de sueño y cansancio y aporta energía vital, hidrata el organismo, asegura el buen funcionamiento de nuestros órganos vitales, ayuda a eliminar toxinas, favorece el tránsito intestinal y fortalece el sistema inmunológico, además reduce la sensación de hambre, ayuda a quemar grasa y a mantener la piel elástica y tonificada ¿alguien da más?

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4. Desayuna sano

Parece el eterno consejo pero es que realmente el desayuno es la comida más importante del día. Después de varias horas de ayuno a causa del tiempo de descanso, nuestro cuerpo necesita volver a poner en funcionamiento toda su maquinaria. Para ello, y como te has levantado antes, disfruta de un buen desayuno equilibrado en el que dejes a un lado los procesados y la bollería industrial. Opta por proteína de calidad, fruta y carbohidratos de bajo índice glucémico, por ejemplo una tostada de pan de centeno con aguacate y huevo y un chorrito de aceite de oliva virgen extra y semillas de sésamo, un zumo de fruta natural, un smoothie verde o una pieza de fruta como kiwi, plátano o naranja, café o infusión. Desayunar de pie un zumo de tetrabrick y unas galletas envasadas tiene los días contados

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5. Prioriza tareas

Establece cuáles son las tres tareas más importantes del día y en base a ellas escoge la que más concentración necesite, una vez que la hayas terminado continúa con las otras dos. Las primeras horas del día son las de mayor productividad así que, centrándote en esas tres responsabilidades prioritarias, te asegurarás un trabajo bien hecho y te evitarás el estrés de tener una lista interminable de obligaciones que no hará más que generarte ansiedad y frustración. No hay nada más gratificante que tachar una tarea y poder pasar a la siguiente sin tener que ir saltando de una a otra dejando todas a medias y sin terminar ninguna. Simplificando tu lista ganas en productividad, concentración y sobre todo en bienestar y tranquilidad.

Aunque al principio pueda parecerte complicado incluir en tu día a día estas pautas que agilizarán tus mañanas, te aseguramos que con el paso de los días se integrarán fácilmente en tu rutina hasta convertirse en un saludable hábito que ya no querrás perder. La vida se ve de otra manera, se disfruta más y fluye con mucha más energía comenzando la mañana con una rutina relajada y que active cuerpo y mente. La sensación de no llegar a todo, el estrés y el cansancio extremo que nos visitaba cada mañana se esfuma. En tan solo 30 días verás los resultados ¿te apuntas al reto?

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