¿De verdad es conveniente combinar la toma de antibióticos con la de probióticos?

Una microbiota intestinal o flora bacteriana saludable es sinónimo de un organismo con buena salud pero ya sabes que la toma de antibióticos puede arrasar con ella y es necesario repoblar esas bacterias beneficiosas. La pregunta es ¿cuándo tomo probióticos para hacerlo?, ¿mientras sigo el tratamiento antibiótico?, ¿los tomo después?

Las bacterias intestinales son importantísimas para mantener una buena salud. Forman parte del sistema inmunológico, previenen enfermedades, minimizan síntomas, reducen la inflamación y ayudan a eliminar toxinas.

Y no solo eso, también se encargan de la producción de vitaminas, la absorción de minerales y la descomposición de fibra soluble a la que convierten en ácidos grasos saludables.

En cuanto al control de peso la microbiota es una pieza clave ya que están involucradas en el proceso de absorción de grasas y tienen la capacidad de regular los niveles de glucosa en sangre.

Visto esto y sabiendo que los antibióticos terminan con la población de bacterias ‘buenas’ del intestino mientras se dedican a curar infecciones lo lógico es pensar que habría que tomar un suplemento probiótico para reponer esas bacterias beneficiosas. ¿Esto es así? Y si lo es, ¿cuándo es el mejor momento para tomar estos suplementos?

Un estudio publicado en la revista científica Cell advierte de que “Después de los antibióticos, los probióticos retrasan la reconstitución del microbioma intestinal.” Una conclusión sorprendente a la que llegaron después de haber administrado un tratamiento antibiótico de amplio espectro a los participantes y observar cómo era el proceso de reconstitución de la flora.

Los participantes que no tomaron ningún suplemento probiótico tuvieron una recuperación espontánea de la flora intestinal a los 21 días, recuperando los niveles que tenían antes de tomar antibióticos. Sin embargo, en los participantes que tomaron probióticos esta recuperación se retrasó hasta 5 meses después de haber dejado de tomar este suplemento. Increíble, ¿verdad? Nos rompe los esquemas.

El lactobacillus por ejemplo, se identificó como un claro inhibidor de la recuperación de la microbiota después de tomar antibióticos.

Aunque los científicos sostienen que el efecto de los probióticos orales es transitorio, también tienen claro que no es inútil, de hecho la doctora Lucy Mailing, experta en microbioma intestinal, señala que “sin duda, se ha demostrado en ensayos controlados aleatorios que hay muchos probióticos que tienen efectos beneficiosos”.

En definitiva y según los últimos estudios, los expertos recomiendan no tomar suplementos orales de probióticos mientras se estén tomando antibióticos ni hasta que se recupere completamente de forma natural la microbiota. Una vez restablecida se puede utilizar como suplemento por sus propiedades beneficiosas para la salud.

Sin embargo sí que recomiendan tomar alimentos con efecto probiótico como el kimchi, el chucrut, la kombucha o el kéfir para ayudar a la microbiota de forma natural a volver a su estado original. Una forma más fácil y económica sin duda de repoblar la flora bacteriana. Esperamos haber despejado tus dudas, nosotras somos las primeras sorprendidas.