La Policía comprueba que el precinto de la fábrica no haya sido manipulado, dentro está el foco de infección: el carro de horneado. Según Manuel González, biólogo "el horno no alcanza la temperatura adecuada" porque a partir de 71 grados se elimina la bacteria. El procedimiento continúa abierto, FACUA se plantea pedir un "interrogatorio al propietario de la empresa y al supuesto gerente".La enfermedad va remitiendo, pero cuatro pacientes aún siguen en la UCI. Dos nuevos casos confirmados en las últimas horas, elevan a 203 los afectados en Sevilla.