Corrector maquillaje
Durante muchos años he usado corrector de ojeras. Siempre he tenido esta zona del rostro algo más marcada. Y aunque he utilizado muchos productos como cremas o parches para la zona del contorno, la realidad es que no hay nada que me haya disimulado la ojera.
A veces por cuestiones genéticas o por un mal descanso, cuesta aclarar la zona de la ojera. Sin embargo, a menos que sea un evento especial, evito usar corrector de ojeras. Para esas ocasiones, apuesto siempre por algo natural y últimamente me han comentado que el mejor formato es en barra. ¿Merece la pena?
Durante años fui fiel al corrector líquido. Me gustaba su textura ligera, su acabado luminoso y ese efecto buena cara con solo un par de toques. Pero había algo que no terminaba de funcionar: las ojeras seguían ahí. Más difuminadas, sí, pero no desaparecían del todo.
Fue entonces cuando unas amigas me comentaron que últimamente usaban mucho el corrector en barra. Sí, ese que parece sacado de un neceser de los años 60. ¿Demasiado cubriente? ¿Anticuado? ¿Solo para pieles jóvenes? Tenía mis prejuicios, y decidí desmontarlos.
El regreso silencioso de un clásico: el corrector de ojeras en barra
El corrector en barra no es nuevo. De hecho, es uno de los productos más antiguos del maquillaje moderno. Marcas como Max Factor lo lanzaron en los años dorados de Hollywood para crear pieles impecables bajo los focos. Su famoso Coverstick Concealer fue el arma secreta de muchas actrices de cine clásico. Y ahora, sin hacer ruido, vuelve a los neceseres gracias a su cobertura impecable y su versatilidad.
¿Merecen la pena los correctores en barra?
Me sorprendió bastante que estos correctores cubren más que los líquidos. Si tienes ojeras pigmentadas o manchitas, funciona como una mini base. Contra todo pronóstico, el stick se funde bien con el calor de la piel. No es esa pasta rígida que recordaba de hace años. Bien trabajado, se integra sin marcar pliegues.
Por otro lado, es una opción cómoda porque no necesitas brocha ni espejo. Aplicas, difuminas con el dedo y listo. Ideal para días que vas con prisa o necesitas retocar sobre la marcha. Aunque es un corrector para usar en la zona de las ojeras, también sirve para cubrir rojeces, granitos, comisuras y párpados. Es como un «borrador de imperfecciones» que puedes llevar siempre contigo.
Los mejores correctores de ojeras en barra
Uno de los corrector de ojeras que todo el mundo recomienda es el Coverstick de MaxFactor. Todo el mundo habla maravillas de este producto asequible. Cuenta con un formato en barra muy fácil de manejar. Se puede encontrar en varias tonalidades.
Se trata de un corrector mate que se integra muy bien en la piel y, a pesar de su acabado cuenta con una textura cremosa. Neutraliza y camufla las imperfecciones. No obstruye los poros. Cobertura total con acabado mate. Ideal para todo tipo de pieles
Otro corrector en barra con muy buenas opiniones es de la firma Lâncome. Se trata del Teint Idôle Ultra Wear Stick. Es un producto todoterreno porque se puede utilizar a modo de corrector, como fondo o para hacer contouring. Tiene una textura cremosa y un acabado mate. Es de larga duración.
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