He probado miles de paletas de sombras nude, pero ninguna me apasiona tanto como estas seis

Hay algo en el maquillaje invisible que nunca pasa de moda. No importa cuántas tendencias arrasen en redes o cuántas sombras vibrantes intenten hacerse un hueco en el neceser: al final, las más elegantes siempre vuelven al makeup no makeup, ese look en el que la piel se ve mejor sin parecer maquillada, las mejillas tienen un rubor sutil y los ojos la dosis justa de color. En ese efecto de belleza effortless que domina las pasarelas y que, en la vida real, nos soluciona cualquier ocasión, las sombras nude son clave juegan un papel fundamental.

Esculpen la mirada sin esfuerzo, aportan profundidad sin que nadie sepa exactamente por qué y logran que un maquillaje sea impecable. Pero aquí hay un problema: no todas las paletas de neutros son iguales. Algunas son demasiado frías, otras demasiado cálidas, otras apenas pigmentan o, peor aún, se ven cenizas sobre la piel. Encontrar la paleta nude perfecta lleva tiempo, hay errores por el camino y, cuando finalmente das con ella, no entiendes por qué no lo has hecho antes.

Después de probar cientos de paletas de sombras (y no exagero, me he llevado muchas decepciones), he dado con seis paletas que merecen un puesto fijo en cualquier colección. Son versátiles, favorecedoras y, lo más importante, tienen ese equilibrio perfecto entre tonos, texturas y acabados que te permitirán crear desde un look natural hasta uno más sofisticado.

Si hay una paleta que redefine el lujo en el maquillaje, es esta. Tonos elegantes, texturas aterciopeladas y un compacto recargable de latón que convierte cada aplicación en un auténtico ritual. Sus sombras son cremosas, ultrapigmentadas y fáciles de difuminar.

Tres sombras en un solo tono, pero con acabados diferentes: mate, satinado y metálico. Es la opción ideal para quienes buscan un makeup no makeup pulido y sin complicaciones. Modulable, fácil de usar y con una textura impecable.

Huda no hace nada a medias, y esta paleta lo demuestra. Con 18 tonos en 5 texturas distintas, es un juego de contrastes entre mates intensos, metálicos sedosos y sombras marmoleadas hipnóticas. Perfecta para un maquillaje de día impecable o un smokey eye de impacto.

Si lo que buscas es una paleta de básicos infalibles, esta es la definitiva. Inspirada en los neutros de los 90, consigue el equilibrio perfecto entre tonos cálidos y fríos, sin caída y con una adherencia impecable.

Pensada para quienes buscan un look perfecto en pocos pasos, esta paleta agrupa sus sombras en tríos complementarios para definir, iluminar y dar profundidad sin complicaciones. Fácil de aplicar, fácil de difuminar y con tonos versátiles que siempre funcionan.

Cuando una paleta pequeña lo tiene todo, no hace falta más. Con nueve tonos que combinan mates aterciopelados y metálicos vibrantes, esta opción compacta es la definición de menos es más. Perfecta para llevar en el bolso.