Las mejores mascarillas para sellar las puntas en verano

Todas buscamos lo mismo en verano: que nuestras puntas estén selladas. Es un imprescindible si quieres que tu melena sobreviva al sol, la sal y el cloro con un mínimo de dignidad. Las mascarillas específicas para este fin se convierten en el último escudo antes de que el daño se instale de forma permanente. Eso sí, no todas son iguales y las mejores fórmulas reparan, refuerzan y protegen la fibra capilar desde dentro, con ingredientes capaces de retener la hidratación y suavizar la superficie del cabello.

A la hora de elegir una buena mascarilla para sellar puntas, busca ingredientes como ceramidas, péptidos, aceites vegetales nutritivos (como el de camelia o argán), y ácido hialurónico si necesitas un plus de hidratación. Evita fórmulas con siliconas pesadas si tienes el pelo fino y, en su lugar, opta por texturas ligeras que no apelmacen pero sí sellen.

También es importante fijarse en los tiempos de actuación, ya que algunas necesitan solo unos minutos, y otras funcionan sin aclarado. Ambas son buenas, solo tienes que tener en cuenta tus necesidades. Lo bueno es que da igual si llevas el pelo teñido, con mechas, rizado o liso, una buena mascarilla reparadora funciona en cualquier tipo de melena. El truco está en ser constante y aplicarla al menos una vez a la semana.

Es ideal si buscas brillo e hidratación sin peso. Su combinación de miel, ceramidas y ácido hialurónico repara y suaviza al instante, y su textura cremosa pero ligera la hace perfecta incluso para melenas finas. Es un tratamiento exprés que se nota desde la primera aplicación.

Está formulada para trabajar en profundidad y devolver al cabello su estructura original. Basta con aplicarla durante diez minutos para notar el cambio: más cuerpo, más suavidad y mucho menos encrespamiento. Es especialmente eficaz en cabellos tratados químicamente.

Es probablemente el tratamiento más técnico y eficaz del grupo. Con solo cuatro minutos de aplicación sin aclarado, repara el daño desde el interior gracias a su péptido patentado. Es apta para cualquier tipo de cabello y sus efectos se notan desde la primera vez que la uses.

Me la recomendó mi amiga María, y la verdad es que cumple lo que promete en tiempo récord. Con aceite de camelia japónica, hidrata, protege y devuelve el brillo sin necesidad de largos tiempos de espera. Perfecta si no tienes paciencia, pero no quieres renunciar a resultados visibles.

Se ha convertido en mi favorita y no exagero. Esta mascarilla nueva de Moroccanoil es una apuesta segura si tu objetivo es lucir un acabado sedoso y luminoso desde la primera aplicación. Es ligera, exprés y apta para todo tipo de melenas.

Lo que la hace tan especial es su fórmula con ArganID™ que sella la cutícula mientras mejora la textura del cabello. Funciona especialmente bien en cabellos apagados o sin vida tras días de playa o piscina. Sin duda, un básico de tu neceser.