Colonias ligeras para días calurosos: huelen genial y duran todo el día

Cuando las temperaturas suben, la piel se vuelve más sensible y los sentidos buscan ligereza. Es ahí donde entran en juego las colonias ligeras, o lo que es lo mismo, fragancias frescas, suaves y elegantes que acompañan sin abrumar y que dan personalidad a una opción sensata (y deliciosa) que te perfuma, pero con discreción.

A diferencia de los perfumes intensos que tanto nos abrigan en invierno, estas colonias tienen una textura olfativa más etérea, casi transparente. Están hechas para fundirse con la piel como una bruma, como el recuerdo de una flor, como la idea de un paseo junto al mar.

Cítricos, almizcles blancos, notas de té, flor de azahar o nerolí… Los ingredientes que las componen suelen ser ligeros pero refinados, con un carácter fresco que resulta infalible en los días más cálidos del año. ¿La clave para llevarlas con acierto? No pensar demasiado. Basta con unos toques en las muñecas, en el escote o incluso en la ropa para que esa sensación de frescura te acompañe durante todo el día..

Con Eden, Cacharel imagina un paraíso íntimo donde cada acorde floral y acuático actúa como una caricia sensorial. Su inicio, con notas de loto y nenúfar, es pura frescura vegetal, como una mañana junto a un río. Luego, el corazón se abre a un bouquet de frutas jugosas y flores blancas que envuelven la piel con dulzura y sensualidad. La base, con mimosa y pachulí, aporta calidez y profundidad sin caer en lo empalagoso. Es un perfume pensado para mujeres delicadas pero seguras, esas que tienen el don de suavizar el mundo con su sola presencia.

Orange Horizon es el tipo de perfume que despierta la piel con la misma intensidad que un amanecer sobre el Mediterráneo. Fresco, efervescente y luminoso, arranca con una naranja sanguina vibrante que se funde con la suavidad del albahaca y el toque cálido del cedro. Es una fragancia que habla de libertad, de tardes al sol con la piel aún húmeda, de vestidos ligeros y sonrisas sin prisa.

Rebelde y refinada, Eau de Courrèges es una de esas fragancias que no envejecen. Su frescura verde, marcada por la menta y el anís, se mezcla con cítricos chispeantes para dar como resultado un aroma limpio, moderno y extremadamente actual, pese a haber nacido en los 70. Es la elección perfecta para mujeres que no necesitan gritar para marcar estilo: independientes, espontáneas y con una sensibilidad estética muy personal.

Es la definición exacta de un perfume que ilumina desde dentro. Es juvenil sin ser inocente y elegante sin pretensión. Su salida de lilas verdes y limón siciliano es como un rayo de luz sobre la piel, mientras que su corazón de peonía, té verde y pétalos de melocotón construye una feminidad suave y vibrante. La base, con ámbar y almizcles, redondea el conjunto con una calidez sutil.

Hay perfumes que son como una joya invisible, y Tous Eau de Parfum es uno de ellos. Equilibrado, limpio y sofisticado, es la fragancia que acompaña con elegancia los momentos que realmente importan.

Su pirámide olfativa está tejida con mimo: flores blancas, notas verdes y un fondo amaderado que le da carácter sin robarle delicadeza. Es un aroma que no cansa, que acompaña sin invadir, y que deja una estela de serenidad sofisticada y atemporal.