DERMATITIS ATÓPICA
DERMATITIS ATÓPICA
La dermatitis atópica es una afección de la piel más común de lo que nos imaginamos y que puede afectar a personas de diferentes edades. Dentro de su sintomatología se encuentra una piel enrojecida, que suele ir acompañada de una picazón intensidad o sequedad, que puede acabar derivando en lesiones con supuración o con descamación. Aunque puede aparecer en cualquier persona, existe un alto componente genético a la hora de que se manifieste.
El eccema es una afección que puede resultar también en problemas de autoestima, teniendo un impacto en la calidad de vida de quiénes lo padecen. El asesoramiento y seguir las pautas de un dermatólogo son esenciales, además de seguir sus recomendaciones. También existen productos de belleza que ayudan a mejorar la calidad de la piel y reducir esos molestos picores.
La dermatóloga Elena Martínez Lorenzo explica que el eccema «es una inflamación de la piel que se manifiesta con enrojecimiento, picor, sequedad, descamación y, en ocasiones, ampollas o grietas». Profundiza la farmacéutica Belén Acero, titular de la Farmacia Avenida América y experta en dermofarmacia y destaca que «es una alteración de la barrera cutánea que provoca una respuesta inmunitaria exagerada frente a estímulos que, en condiciones normales, no deberían causar una reacción».
Entre las causas por las que se produce, detalla la farmacéutica Karla Pires, que es responsable de calidad en Planet Skin, pueden ser «desde predisposición genética, alteraciones del sistema inmunológico, hasta factores ambientales como el frío, la contaminación o incluso el estrés». Considera también «ciertos ingredientes cosméticos, tejidos sintéticos o jabones agresivos que pueden desencadenar o empeorar los brotes». Explica la doctora Martínez Lorenzo que hay múltiples tipos de eccema como «de origen autoinmune, dermatitis de contacto alérgica e irritativa, eccema seborreico, eccema numular» y añade que «el origen es muy variado». Entre los factores se encuentran los «genéticos, inmunológicos, ambientales, irritantes, alérgenos, estrés, cambio climático o infecciones».
¿Quiénes son las personas con más tendencia a sufrir eccema? En el caso de Elena Martínez Lorenzo, esta considera que es «una condición común y cualquier tipo de pieles podrían sufrirlos, pero son aquellas que tienen la barrera cutánea más debilitada o con cierta predisposición genética e inmunológica las más susceptibles». Esto es, como añade Belén Acero, porque se «facilita la pérdida de agua y la entrada de alérgenos e irritantes. También puede aparecer en personas con antecedentes familiares de alergias, asma o rinitis». También existen otros factores que lo desencadenan como «el frío o el calor intenso, los climas secos, las duchas largas y con agua muy caliente, el uso excesivo de jabones o el estrés» considera la doctora Martínez Lorenzo.
El acompañamiento de un dermatólogo en este tipo de enfermedades de la piel es muy importante, ya que siempre intentará buscar el tratamiento más adecuado. Destaca la dermatóloga Elena Martínez Lorenzo que es «fundamental usar cremas barrera que ayuden a reforzar esa barrera que está debilitada de base. Cremas en base a ceramidas, ácidos grasos, lípidos… si tienen combinadas ácido hialurónico sería lo ideal, ya que aportan hidratación».
Un punto en el que coincide Karla Pires de Planet Skin que recomienda «una rutina suave, minimalista y muy hidratante». En ella, considera los «limpiadores sin jabón (syndet), evitar el agua muy caliente y aplicar una crema emoliente o bálsamo reparador justo después de la ducha, cuando la piel aún está húmeda, es esencial». Advierte, además, sobre el uso de «cualquier cosmético con perfume o alcohol».
En cuanto a los activos a buscar, añade Belén Acero los ingredientes «calmantes y restauradores. Algunos imprescindibles son la niacinamida, que reduce la inflamación; la avena coloidal, que calma el picor; la manteca de karité y la glicerina, que nutren en profundidad y las ceramidas, que refuerzan la barrera cutánea». Por último, «en casos más severos, puede ser necesario recurrir a tratamientos con corticoides tópicos bajo supervisión médica».
En cuanto a qué evitar, la farmacéutica Karla Pires considera «el uso de exfoliantes físicos, retinoides, perfumes y aceites esenciales, ya que pueden irritar aún más la piel». Otras recomendaciones serían, «usar ropa de algodón y mantener una buena hidratación desde dentro. A veces, complementar con suplementos como omega 3 o probióticos puede ayudar, siempre con el consejo de un profesional».
Gaura Natural Cosmetics
La firma española cuenta con una amplia gama de jabones entre los que se encuentra el Jabón Sólido Reparador. Elaborado con aceite de oliva y aceite de bayas de laurel, calma el picor, además de aliviar la inflamación. Está indicado para pacientes con dermatitis atópica, psoriasis o eccemas. (7,50 euros)
Grace and Stella
La bruma facial Spray All Day refresca la piel, mientras que la calma, por lo que está indicada para pieles con eccema. También ayuda a las pieles acneicas y a cicatrizar, gracias a su fórmula con agua de rosas. (9,95 euros)
Sublime Oils
Ultra Hydrating Serum es un producto perfecto para aplicar antes y después de la exposición solar. Cuenta con efecto calmante por su fórmula con activos como el aloe vera y el omega 3, lo que lo convierte en un producto perfecto para pieles con psoriasis y eccemas. (54 euros)
CeraVe
Formulada con tres ceramidas esenciales, sello de la casa, la Loción Hidratante Intensiva alivia el picor causado por la piel seca presente en los eccemas. Ayuda también a restaurar la barrera cutánea, sin dejar residuos grasos en la piel. (22,54 euros)
Apivita
Pantenol, aloe bioactivo y complejo hidratante de miel de tomillo griego son las claves detrás de la fórmula de Caring Lavender. Una crema corporal que nutre la piel en profundidad y que está indicada para pieles con eccema. (12,90 euros)