Si hay algo que todas queremos es que ese buen tono que hemos conseguido durante las vacaciones nos dure hasta el otoño. ¿Es posible? Sí, pero dependerá del fototipo de piel y de los cuidados que le proporcionemos.
Diego Hoyos Plaza, responsable de formación de Laboratorios Phergal, nos da las claves: «Primero hay que saber que, en función de mi fototipo de piel, obtendré un bronceado más o menos intenso y duradero. Y luego que hay numerosos nutrientes que nos ayudan a estimular la melanina y cosméticos que aceleran su producción, además de hidratar la piel».
Luz García Toro, directora de comunicación de Arkopharma, recomienda «incluir en nuestra dieta alimentos ricos en betacarotenos (verduras y frutas naranjas y amarillas), verduras de hoja verde y tomate, rico en licopeno. Además de nutricosmética antes y después de la exposición solar».
Pero los imposibles no existen y la piel tiene sus tiempos. «Después de un mes, la epidermis se habrá renovado y se habrá perdido gran parte de la pigmentación adquirida», concluye.