Crear una cuenta
Iniciar sesión
Ha causado una enorme tristeza en círculos sociales y financieros la reciente muerte de Alfonso de Borbón y Escasany. El que fuera consejero de AXA, primo lejano del rey Juan Carlos I, tenía 80 años y ha dejado un enorme vacío en su familia; su viuda, la siempre elegante Marisa Yordi, y sus dos hijos Alfonso de Borbón, casado con la modelo Eugenia Silva, y Alejandra, ex de Bosco Ussía, hijo del periodista Alfonso Ussía, de quien se separó en 2019. Deja tras de sí una importante herencia material y también emocional para toda la familia.
Respecto a la masa hereditaria, según desvela Vanitatis, más allá de los ingresos que tuvo en la filial española de la aseguradora francesa AXA, estuvo dedicado a los negocios inmobiliarios. Era propietario junto a su hermano, el duque de Sevilla, de Keka Socimi, una compañía inmobiliaria cuyas inversiones en ladrillo cifra la mencionada publicación en unos seis millones de euros.
Según manifiestan, si por algo se caracteriza esta empresa es por el buen criterio en la elección de los inmuebles, por su ubicación y su uso, en distintas ciudades como Madrid, Barcelona y Sevilla. En general optaron por locales comerciales, edificios de oficinas y garajes.
En cuanto al patrimonio personal del fallecido destaca la residencia familiar de El Viso, en Madrid, una de las zonas más privilegiadas de la capital, que compraron en los años 70. Se trata de una vivienda de unos 460 metros cuadrados que la publicación valora en torno a los 4 millones de euros, ateniéndose a las tendencias de mercado en esa zona.
Asimismo, añaden que el matrimonio compró en los años 80 dos parcelas en la urbanización marbellí de Guadalmina, una de las zonas más elitistas de la Costa del Sol, donde se daban cita las principales figuras de la jet-set nacional e internacional. Vivieron, sin duda, la época de máximo esplendor. Allí se encuentra también la casa de verano de los Goyanes-Lapique, a los que les ha unido una gran amistad.
Los tres herederos directos de Alfonso de Borbón
Los tres herederos directos son Marisa Yordi, el gran amor de su vida, y sus dos hijos, Alfonso y Alejandra, que se han caracterizado siempre por llevar unas vidas muy discretas y en la medida de lo posible, apartadas de los medios de comunicación, aunque lógicamente suscitan el interés de la crónica social.
Su viuda, Marisa Yordi llevaba una larga temporada apartada de la vida pública y solo acudía a algunos actos muy especiales como la fiesta por el 70 cumpleaños del ex presidente José María Aznar, pero hubo un tiempo en que fue una figura muy codiciada por la prensa del corazón, por sus amistades con figuras del calibre de Isabel Preysler, Carmen Martínez-Bordiú y Jaime de Marichalar.
-U66142544137eLL-302x302@Mujer%20Hoy.png)
Lo mismo puede decirse de su hijo, Alfonso de Borbón, casado con Eugenia Silva. Comenzaron a salir en 2007 y rompieron en 2009. La causa que se adujo fue la distancia, porque Eugenia en esos momentos estaba establecida en Nueva York. Tras un largo paréntesis, retomaron su relación en 2015, al coincidir en una fiesta organizada por Cari Lapique, íntima amiga de Marisa Yordi. Son padres de dos hijos.
Alejandra, por su parte, es la menos conocida de los tres y, aunque tiene cierta presencia en redes sociales, no se prodiga en eventos ni convocatorias públicas. Tanto sus hermanos como ella están viviendo ahora momentos muy duros.
Temas
Cari LapiqueLo más visto
Top 50-
1 Tensión entre Irene Montero y Nuria March: la respuesta increíblemente elegante que zanjó el debate sobre tener o no tener modales de señorita
-
2 El modesto pasado de la reina Letizia en el piso donde se ha instalado Paloma Rocasolano en Madrid: vida de barrio y anonimato
-
3 La reina Letizia rescata su traje gris de cuadros más elegante de Hugo Boss para la reunión con la Fundación Princesa de Girona
-
4 La peor pesadilla de la reina Letizia: el rey Juan Carlos da su versión del incidente con la reina Sofía en la catedral de Palma
HORÓSCOPO
Sagitario
Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.