Las tragedias que han marcado la vida de Isabel Preysler: las muertes de tres de sus hermanos y la de Miguel Boyer

La noticia de que por fin Isabel Preysler se va a contar a sí misma ha generado ya una expectación enorme. Espasa es la editorial que va a publicar el próximo 22 de octubre Mi verdadera historia, unas memorias en las que vamos a poder conocer de su puño y letra parte de su vida que hasta el momento hemos conocido por la prensa y otras facetas que se había guardado para sí misma.

Sin duda, la vida de Isabel Preysler ha sido apasionante, hasta tal punto que recibió el apelativo de reina de corazones al haber sido durante décadas la mujer que más ejemplares de revistas ha vendido. Ha llegado la hora de que conozcamos a la socialité desde nuevos ángulos. Posiblemente sea uno de los grandes éxitos editoriales de este otoño. También son muy esperadas, por cierto, las de Carmen Cervera, que está elaborando en la actualidad.

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Aunque muchos puedan creer que la vida de Isabel Preysler ha sido todo lujo y felicidad, no todo ha sido tan fácil como parece. Desde su marcha de Filipinas a España, dejando a gran parte de su familia allí, a sus dos divorcios de Julio Iglesias y el ya desaparecido marqués de Griñón, y la larga y dolorosa convalecencia de Miguel Boyer, hasta su muerte el 29 de septiembre de 2014, muchos son los difíciles retos que ha tenido que afrontar en su vida.

No se quedará en el tintero tampoco su historia de amor con Mario Vargas Llosa, que se rompió de una manera menos amistosa de lo esperado y sobre la que ella ha guardado un elegante silencio, mientras el que fuera Nobel de Literatura publicó una carta nada edificante al regresar al lado de su ex mujer, Patricia Llosa, y sus hijos, de los que se había distanciado mucho.

Los momentos más duros de la vida de Isabel Preysler están relacionados con las pérdidas de sus seres queridos. La última en marcharse fue su madre, Betty Arrastia, a la que siempre estuvo muy unida. Falleció el 22 de agosto de 2021 a los 98 años e Isabel estuvo cuidándola hasta el último momento en su casa de Puerta de Hierro.

Betty Arrastia sufrió mucho la pérdida de tres de sus seis hijos. La más conocida, después de Isabel, era Beatriz Preysler, que sucumbió a un cáncer de pulmón en 2011 a los 53 años. «Yo tenía 24 años entonces, ya una edad considerable, pero da igual la edad que tengas, la falta de una madre siempre será la falta de una madre. Se nota su ausencia. Es ley de vida», manifestaba Álvaro Castillejo, uno de los dos hijos de Beatriz, en una entrevista en Mujerhoy en 2023.

La muerte de su hermano Ricky en Hong Kong fue un golpe durísimo para toda la familia. Tuvo lugar en un hotel y, al parecer, fue consecuencia de la mala combustión de una estufa. Tenía solo 25 años. Dejó una hija, Joanna, con la que Preysler, según manifestó en 2013, en Vanitatis, mantiene un trato telefónico muy habitual. Es diseñadora de moda y galerista.

Su hermano Carlos se hizo adicto a las drogas en su adolescencia. Isabel reconocía en esa entrevista que la suya fue una generación perdida en Filipinas y que ella logró escapar de ese tipo de situaciones al venirse a España. Según contó, había estado en prisión entre 1994 y 2004 y falleció en abril de 2013 víctima de un cáncer fulminante.

Han sobrevivido dos de los hermanos de Isabel, Victoria y Joaquín, que emigró a Canadá e hizo su vida allí. Preysler siempre ha sido una mujer muy familiar, como demuestra lo pendiente que ha estado siempre de sus hijos, Chábeli, Julio José y Enrique Iglesias, Tamara Falcó y Ana Boyer, que tantas satisfacciones le dan, al igual que sus nietos. Enrique, por cierto, va a ser padre por cuarta vez con Anna Kournikova.

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