DÍAS MUY DUROS
DÍAS MUY DUROS
Esta mañana antes de trascender la muerte de su suegro, el presidente del Gobierno había cancelado su agenda oficial después de haber participado en la sesión de control al Gobierno en el pleno del Congreso. Moncloa apuntaba a motivos personales, pero no desvelaba la causa de su ausencia, 24 horas después del importante acuerdo entre PSOE y PP de renovar el Consejo General del Poder Judicial tras cinco años bloqueado.
Por la muerte del padre de su mujer, Begoña Gómez, el presidente del Gobierno había cancelado los actos previstos para esta tarde. No en vano se iba a desplazar a Valencia para participar en el I Foro Económico y Social del Mediterráneo. Para acompañar a su mujer en momentos tan difíciles, había modificado su agenda en estos días.
Por ese motivo tampoco viajó la tarde del martes a Barcelona para participar en Barcelona en el acto de la 377 edición de los Premios Pymes, organizados por la patronal catalana Pimec. La salud de Sabiniano Gómez se había agravado y era crucial para el presidente estar junto a Begoña Gómez ante lo que se preveía un inminente final.
De origen leonés y empresario de profesión, Saviano Gómez estaba muy unido a su hija Begoña, que nació en Bilbao en 1975, aunque pasó sus veranos en la localidad de Valderas, de donde era originaria su familia materna. Su padre, por su parte, era oriundo del municipio leonés de Gordoncillo.
Sabiniano y su mujer tenían orígenes muy similares, pues procedían de familias relacionadas con la agricultura y el pastoreo. Una prima de la mujer del presidente, Feli Rodríguez, contó a los medios locales que sus respectivas casas estaban juntas y que mantuvieron siempre una relación muy estrecha.
Begoña Gómez está viviendo en la actualidad momentos delicados, pues tiene pendiente acudir a declarar por estar siendo investigada por tráfico de influencias, después de que fuera admitida a trámite una denuncia del sindicato ultraderechista Manos Limpias. La cita es el próximo 5 de julio a las 10 de la mañana.
Como se recuerda, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez mandó una carta a la ciudadanía en la que mostraba la posibilidad de no seguir al frente de su cargo. Se tomó cinco días para reflexionar y dejó muy claro que es un hombre profundamente enamorado de su mujer.
Posteriormente, Pedro Sánchez manifestó que no dejaría su cargo, que se sentía con fuerzas para agotar la legislatura y repetir como candidato si fuera menester. Asimismo, en la campaña de las elecciones al parlamento europeo, en una manifestación de fuerza, acudió con su mujer, Begoña Gómez en Benalmádena, donde les vimos con las manos entrelazadas.
Ahora en estas circunstancias tan duras para Begoña Gómez, Pedro Sanchez vuelve a ser un gran apoyo para su mujer, al igual que sus dos hijas, que siempre han optado por mantenerse en un muy discreto segundo plano.