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Quién es la sobrina díscola de la reina Beatriz de Holanda: divorcios, espionaje y una madre princesa rebelde

La princesa Margarita de Borbón-Parma lleva hoy una vida tranquila, pero hubo un tiempo en que su relación con los Orange-Nassau fue muy tormentosa.

La princesa Margarita de Borbón-Parma. gtres

La princesa Margarita de Borbón Parma, hija de la princesa Irene, hermana de la ex reina Beatriz de Holanda, lleva hoy una vida tranquila, acudiendo a algunos actos oficiales y dedicada a su negocio de diseño de joyas. Su elegancia compite con la de Máxima, aunque Margarita tiene un estilo más sobrio. Sin embargo, su vida y su relación con la familia real no siempre fueron tan sosegadas. Hubo un tiempo en que Margarita fue un dolor de cabeza permanente para la familia real.

Su primer matrimonio provocó una oleada de polémicas con los Orange-Nassau y con su tía Beatriz, a la que llegó a llamar «borracha» en una entrevista al igual que llamó «ignorante» a su primo, el rey Guillermo Alejandro que, según ella, creía que Voltaire era una ciudad. Tampoco se libró de sus comentarios escandalosos la reina Máxima que, según afirmó, tenía una pésima relación con su suegra. La exreina es la madrina de bautismo de Margarita.

La princesa Margarita tiene hoy 52 años. En 2001 contrajo matrimonio con el empresario Edwin de Roy van Zuydwijn en contra del criterio de toda su familia, que consideraba poco transparentes sus negocios e inaceptable que hubiera mentido sobre sus calificaciones académicas. Margarita optó por airear en público todos los problemas de aquel matrimonio.

Llegó a asegurar que la Casa Real había montado una operación de espionaje contra su entonces marido, colocando micrófonos en su casa, algo que se demostró falso, aunque sí era cierto que el Gobierno le había investigado. El escándalo hundió el negocio financiero de van Zuydwijn y los novios amenazaron con interponer una demanda por daños y perjuicios contra el Estado holandés.

No fue invitada a la boda de Guillermo y Máxima

Margarita no fue invitada a la boda de Guillermo y Máxima de Holanda, celebrada en febrero de 2002. El matrimonio de la princesa duró hasta 2006 y, con la ruptura, Margarita tuvo que enfrentarse a un largo proceso de divorcio en el que su hasta entonces esposo le reclamaba una desorbitada pensión de manutención. La separación sirvió, al menos, para que Margarita hiciera las paces con su familia y reconociera que había hecho daño a mucha gente con su matrimonio. La princesa se volvió a acercar a su tía Beatriz, con la que siempre había tenido una cariñosa relación desde niña. La calificaba como su «tía favorita».

Margarita se casó, por segunda vez, en 2008, con el abogado Tjalling ten Cate, con el que tuvo dos hijas, Julia de 16 años, y Paola, de 13. La prueba de que las cosas habían cambiado con su familia fue su presencia en la proclamación de Guillermo y Máxima como reyes, en 2013. Pero este segundo matrimonio también acabó en divorcio, en 2023, aunque el proceso fue mucho más tranquilo que en el anterior. La separación fue de mutuo acuerdo.

La princesa Margarita de Borbón-Parma, en una imagen reciente. gtres

«Después de un tiempo maravilloso de más de dieciséis años de convivencia, durante los cuales compartimos alegrías y tristezas, ahora cada uno de nosotros seguirá su propio camino», explicaban en un comunicado. Ambos afirmaban también que seguirían «caminando juntos siempre como amigos y padres amorosos de nuestras dos hermosas hijas».

Margarita de Holanda, otra princesa rebelde

Margarita nació en Nimega, en Países Bajos, en 1972, y tiene un hermano mellizo, Jaime Bernardo. Es hija de la princesa Irene, hermana de Beatriz, y de Carlos Hugo de Borbón-Parma, el aspirante carlista al trono de España. Su padre no acudió al enlace con Edwin de Roy van Zuydewijn.

Margarita de Borbón-Parma, sobrina díscola de la reina Beatriz de Holanda. gtres

El actual aspirante y jefe de la familia es su hermano, Carlos de Borbón-Parma. Margarita ostenta el título de Condesa de Colorno. Su madre, la princesa Irene, también fue en su tiempo una princesa rebelde. Estuvo alejada de su familia porque los Orange-Nassau no admitían que se hubiese casado con un príncipe católico. Su matrimonio supuso un escándalo mayúsculo.

La pareja se instaló en Madrid y tuvo cuatro hijos: Carlos Javier, los mellizos Margarita y Jaime, y Carolina. Margarita tenía nueve años cuando sus padres se divorciaron y fue a vivir al Palacio de Soestdijk con sus abuelos maternos, Juliana de los Países Bajos y Bernardo de Lippe-Biesterfeld. Estudió Arquitectura de Interiores en La Haya, y vivió la mayor parte de su juventud en Inglaterra y Francia.