MOMENTO DE CAMBIOS
MOMENTO DE CAMBIOS
Los ciclos vitales son muy similares para todo el mundo. Por eso se encontró la denominación «síndrome del nido vacío» cuando los hijos dejan la casa familiar para volar solo. Una situación que están viviendo los reyes Guillermo y Máxima de Holanda, y que antes ya experimentaron nuestros monarcas, Felipe y Letizia. Primero se marchó su hija mayor, la princesa Leonor, a estudiar a Gales, al UWC Atlantic College, y después, a realizar su formación militar. La última en salir fue la infanta Sofía, que cursa sus estudios en el mismo internado.
Se dice que en esos momentos los padres suelen tener sentimientos de vacío, soledad e incluso tristeza y estos sentimientos se los atribuyen ahora a los reyes de los Países Bajoslos medios internacionales. El abandono de sus tres hijas ha sido paulatino, pero ahora ha llegado el momento de la verdad.
La reina Máxima de Holanda, de 53 años, y su marido, Guillermo Alejandro, de 58 años, se están adaptando al cambio, una vez que la princesa Ariane ha sido la última en abandonar palacio para emprender sus estudios. Han vivido tres veces esta situación, pero nunca han perdido la sonrisa. Al fin y al cabo, sí se han podido ver con relativa frecuencia.
Lo más complicado, sin duda, fue cuando la princesa heredera Amalia, se tuvo que establecer en España para garantizar su seguridad. Por este motivo quedaron muy agradecidos, en especial a los reyes de España, y recientemente recaló en Madrid para inaugurar el jardín de tulipanes que ha regalado a nuestro país.
Ha sido ahora cuando la reina Máxima de Holanda se ha pronunciado sobre esta situación. Con motivo de la celebración del Día del Rey, el pasado 26 de abril, la reina manifestó que «es un poco difícil acostumbrarse a no tenerlas más en casa». Aun así, es una situación muy similar a la que ella vivió cuando en su época de abrirse camino en la vida se marchó a Nueva York mientras su familia permanecía en Argentina.
Máxima de Holanda desveló a la Fundación Holandesa Omroep (NOS) que sigue viendo a sus hijas con regularidad: «Afortunadamente, vuelven a casa muy a menudo. Además, de vez en cuando yo también voy a visitarlas. Es un placer, pero, inevitablemente, las extraño mucho».
No todo son inconvenientes para Máxima de Holanda, que subrayó que «antes intentaba estar en casa al menos a las seis de la tarde, pero ahora ya no es tan importante. De esta forma puedo tener más reuniones y visitas y llegar a casa más tarde». La ausencia de sus hijas le ha dado «un poco más de libertad», apostilló la reina, que no acudió al funeral del papa Francisco por la festividad nacional en Holanda.
La princesa Alexia se marchó a Gales, al UWC Atlantic Collegel en 2021, con 19 años, para terminar la secundaria, y su hermana Amalia se mudó a Amsterdam a los 21 para emprender sus estudios universitarios. Ariane, de 18, se marchó a Italia para terminar la secundaria en el verano de 2023. Era solo el comienzo de sus carreras y ahora ya están inmersas en construir su futuro.
Amalia de Holanda, princesa herederay futura reina del país, sigue en la universidad de Amsterdam, donde va a culminar un grado interdisciplinario de Políticas, Psicología, Derecho y Economía. Su hermana Alexia, por su parte, estudia en el University College London (UCL) la licenciatura en Ciencias e Ingeniería para el Cambio Social, en la Facultad de Ingeniería. La menor, Ariane, estudia el bachillerato internacional en el internado UWC Adriatic, en Trieste, Italia. Anteriormente, estudió en el Christelijk Gymnasium Sorghvliet en La Haya.