Quién es Pedro Trapote, el empresario íntimo del rey Juan Carlos I en cuyas discotecas debutó Froilán (y Felipe VI bailó rumba con Isabel Sartorius)

El empresario Pedro Trapote, creador de Joy Eslava y Pachá, tiene una relación de confianza con el rey Juan Carlos.

Felipe VI, en una imagen de cuando era príncipe de Asturias, saliendo de la discoteca de Pedro Trapote, Joy Eslava / gtres

Silvia Vivas
SILVIA VIVAS

El empresario Pedro Trapote ha saltado de las páginas salmón a las de la prensa rosa por un triste motivo: su mujer, Begoña García-Vaquero, ha sufrido un ictus. Un buen momento para recordar la trayectoria del que fuera el rey de la noche madrileña y protector de las fiestas de varias generaciones de Borbones.

Casado en cuatro ocasiones, padre de cinco hijos, cuñado actual de Felipe González, íntimo de Juan Carlos de Borbón y propietario de la chocolatería más famosa de Madrid (San Ginés), la relación de Pedro Trapote con nuestra familia real ha sido cultivada durante años. ¿Pero quién es Pedro Trapote?

Cómo gestó su fortuna Pedro Trapote: el rey de la noche madrileña

Nacido en Valladolid, hijo de un carpintero, Pedro Trapote orientó sus primeros negocios a la Costa del Sol pero acabó adueñándose de la noche madrileña. Aunque sus inicios laborales le orientaron hacia la banca. Primero fue director de una sucursal del Banco Bilbao en Barcelona y después director general de la Caja Continental de Crédito en Madrid.

Finalmente se decidió a dar el salto de la banca al de la empresa privada e intentar aprovechar el boom del turismo en la España de los 70. Comenzó abriendo locales de ocio nocturno en la Costa del Sol y Canarias, y en 1981 creó la discoteca que le haría famoso (y rico): la madrileña Joy Eslava.

Diez años más tarde ya era dueño de otro de los templos de la noche madrileña más pija, el Pachá que hoy se conoce como Teatro Barceló. Pero de todo su imperio de ocio nocturno el empresario octogenario ahora mismo solo conserva su proyecto más dulce y exportable: la chocolatería San Ginés, la misma en la que Isabel Sartorius y el prínicpe Felipe desayunaban y que ha llevado desde el callejón madrileño hasta países tan lejanos como China, Japón o Colombia.

Todos los locales propiedad de Pedro Trapote han sido testigos de la evolución de la sociedad española. Si en Joy Eslava se rodó durante años el famoso programa televisivo Aplauso y puede presumir de haber tenido a José Coronado como relaciones públicas, Pachá y San Ginés no se quedan atrás en cuanto a anecdotario.

Oedro Trapote y su esposa, Begoña García-Vaquero

Por Pachá desfilaron en tiempos desde Andy Warhol a Estefanía de Mónaco y en San Ginés recaló el presidente de los Estados Unidos Jimmy Carter para tomarse unas porras en el reservado para VIPs. Pero para nosotros, los VIPs más importantes de sus locales serán siempre los Borbones.

La cercana relación de Pedro Trapote con la familia real

Siendo el propietario de las versiones castizas del Studio 54 neoyorquino que los más jóvenes de la familia real acabaran recalando en los locales de Pedro Trapote era cuestión de tiempo.

Durante sus años de juventud y soltería era fácil ver a Felipe, príncipe de Asturias, con sus amigos (y sus escoltas) bailando rumba en Pachá y Joy Eslava. Una costumbre que se extendió en el tiempo: célebre fue la ocasión en la que le pillaron solitario y pensativo tomándose una copa en el local de Barceló mientras en un extremo de la barra Iñaki Urdangarin disfrutaba de la noche madrileña con sus amigos y en el otro Álvaro de Marichalar también pasaba un buen rato.

En cuanto a las nuevas generaciones de Borbones, Victoria Federica de Marichalar, y su entonces novio Dj Barce, no faltaron a la reapertura del Teatro Barceló en cuanto las restricciones por el covid permitieron a la discoteca volver a funcionar.

Pero sin duda la incursión borbónica en los negocios de Pedro Trapote más famosa fue la que se produjo cuando Felipe Juan Froilán de Marichalar y Borbón fue descubierto por El Mundo en 2013 haciendo de relaciones públicas para la discoteca Joy Eslava.

De aquella, el propio Pedro Trapote tuvo que dar explicaciones en la prensa: « Froilán nunca trabajó ni tuvimos relación laboral. Es un hombre joven con derecho a divertirse y a relacionarse con gente de su edad, y lo que hacía era colaborar con su amplio grupo de amigos y conocidos», explicó el empresario.

Pero sin duda, con quien sí ha tenido a lo largo de los años una larga relación Pedro Trapote ha sido con el emérito, don Juan Carlos de Borbón. Durante años fue fácil verles juntos en cacerías en la finca La Flamenca e incluso

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En 2019 fue muy comentada la comida que le organizó al monarca después de que este anunciara su retiro de la vida pública. En aquella ocasión Pedro Trapote reunió en su propiedad de El Jardín de Oñate, en Aranjuez, a los 20 amigos más taurinos de Juan Carlos de Borbón y agasajó al monarca con una buena comida, buena compañía y una visita a la Feria de San Fernando.

Ni siquiera el «exilio» del rey en Abu Dabi ha enfriado la confianza que Pedro Trapote le tiene al monarca, al que considera una pieza clave de la modernización de España en la Transición. Durante la pandemia no dudaba en conectar en directo en el programa de Susanna Griso y comentar que el rey estaba pasando la crisis del covid «enclaustrado como todos».

Cuando los periódicos hicieron público el listado de empresarios que habían colaborado para sanear las cuentas del monarca, a todos les sorprendió que el nombre de Pedro Trapote no estuviera incluido. Él tenía clara su posición: « No me han pedido nada, pero si me lo hubieran consultado habría estado encantado de ayudar a Su Majestad».

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