Letizia, de boda plebeya: los cinco enlaces con looks originales donde la reina aprendió de sus errores

No hemos visto a Letizia en ninguna boda ni aristocrática ni plebeya desde que es reina de España. Pero en otros tiempos acudió a enlaces de familiares, amigos y, sobre todo, amigos y primos de su marido, el rey Felipe VI, en los primeros años de su propio matrimonio. En algunas coincidieron con la familia de los eméritos al completo y, en algunas ocasiones, incluso llevaron con ellos a la princesa Leonor cuando todavía era muy pequeña, como ocurrió en la boda en Ibiza de Bianca Labriola y Christoff Von Reiche.

No han sido muchas las bodas a las que ha acudido Letizia a lo largo de los casi 20 años que lleva casada con Felipe VI, pero los looks de la reina en estas cinco bodas privadas a las que ha asistido en este tiempo fueron muy comentados y algunos dieron lugar a controversia. Repasamos las elecciones de estilo de doña Letizia como invitada a través de los años.

Faltaban más de dos meses para su enlace matrimonial, cuando el Príncipe de Asturias y doña Letizia acudieron a la boda de Abigail Rocasolano, sobrina de Paloma Rocasolano y prima de la entonces futura princesa, en Boadilla del Monte. Al enlace asistieron los abuelos maternos de la prometida de Don Felipe, Francisco Rocasolano y Enriqueta Rodríguez, entre otros familiares y amigos de los contrayentes.

Finalizada la ceremonia religiosa, el entonces príncipe de Asturias salió de la iglesia del brazo de la abuela de doña Letizia, un gesto que fue muy comentado. En esta ocasión, doña Letizia apostó por un traje de chaqueta gris brillante y accesorios en negro, incluyendo un par de guantes, para algunos, el peor estilismo de su guardarropa.

De rosa chicle y de Felipe Varela, doña Letizia brilló con un estilismo de falda con volantes, cuerpo de encaje y chaqueta ajustada. A la ceremonia del hijo menor de la infanta doña Pilar, celebrada en el real Monasterio de la Encarnación de Madrid, asistieron también los reyes eméritos, así como los duques de Lugo y los duques de Palma. Los príncipes de Asturias ya habían sido testigos, en el mes de mayo, de la petición de mano de Fernando y Mónica.

Doña Letizia estaba embarazada de ocho meses de la Princesa Leonor, cuando asistió a la boda de Álvaro Fernández de Araoz Gómez-Acebo con la joven alemana Nathali Picquot en la iglesia de San Pedro Apóstol, en Olías del Rey, Toledo. El novio es sobrino de la infanta Pilar, la hermana del rey Juan Carlos.

Doña Letizia eligió un conjunto de vestido y chaqueta en tono malva con accesorios en negro. Destacaba su llamativo maxi bolso de flecos. La Princesa de Asturias rompió el protocolo a la salida de la iglesia y se acercó hasta las vallas que se habían instalado por motivos de seguridad para dar la mano a algunos vecinos de Olías del Rey que aprovecharon la oportunidad para darle la enhorabuena por su embarazo.

Con la princesa Leonor en brazos, los entonces príncipes de Asturias acudieron a la boda de uno de los mejores amigos de don Felipe, celebrada en Ibiza, en la parroquia de San Rafael. El Príncipe de Asturias y el novio se conocieron en su época de estudios en la Universidad de Georgetown. Don Felipe fue el encargado de realizar la primera lectura de la ceremonia, en la que recitó un pasaje del «Génesis».

Von Reiche fue uno de los testigos del enlace de don Felipe y doña Letizia, celebrado el 22 de mayo de 2004 en la Catedral de La Almudena de Madrid. Doña Letizia escogió un vestido rosa de escote en pico con cinturón joya y chal a juego, de Felipe Varela, y sandalias de nudo. La Princesa de Asturias, que lo miraba todo con curiosidad, llevaba un vestido blanco.

El novio es uno de los mejores amigos de Don Felipe, compañero de colegio. El enlace se celebró en Málaga y los entonces Príncipes coincidieron con Isabel Sartorius, Fiona Ferrer, Rosauro Varo, Victoria de Borbón Dos Sicilias o Beltrán Gómez-Acebo. La ceremonia se celebró en la Hacienda Nadales, una hermosa finca situada a las afueras de Málaga.

Los príncipes abandonaron la celebración pasadas las cinco de la mañana. Los fotógrafos captaron la llegada de Don Felipe y Doña Letizia, en coche, pero no fue posible averiguar el estilismo de la princesa, aunque sí se podía observar que había apostado por un recogido trenzado con detalle sobre la frente.

Sin embargo, tiempo después, durante su visita oficial a Estados Unidos, en septiembre de 2015, doña Letizia recuperó el vestido, un diseño años veinte, digno de una velada del Gran Gastby. El diseño de Felipe Varela, en seda gris perla y con aplicaciones plateadas, causó sensación. Lo completo con un peinado de ondas al agua.