UNA PRINCESA CON HISTORIA
UNA PRINCESA CON HISTORIA
A la princesa Sofía de Habsburgo la vida le ha puesto pruebas durísimas, pero a sus 65 años podemos decir que ha conseguido superarlas o al menos paliar el profundo dolor que le generaron. La primera fue la muerte de su hermana en los años 80. Elizabeth de Habsburgo contaba solo 24 años. La segunda, la muerte de su hijo mediano, Alexis, en un accidente de tráfico cuando contaba sólo 18 años en 2010. Ahora Sofía de Habsburgo es una mujer renovada e ilusionada con el futuro.
En aquellas fechas, ya había lanzado su firma de bolsos que lleva su nombre y su hijo fallecido le había organizado su primera entrevista con la revista francesa Point de Vue. Fue un proyecto en el que sigue volcada en la actualidad, que logró sacar adelante gracias a la insistencia de sus cosmopolitas amigas y en el que trabaja ahora con su hija, Larissa, princesa de Windisch-Graetz. Los han lucido, entre otras, Máxima de Holanda, y la princesa Sophie, mujer del príncipe Eduardo de Inglaterra.
Sin duda, la vida de Sofía de Habsburgo daría para una novela con todo tipo de ingredientes. Contrariando la opinión familiar se puso a trabajar como modelo mientras estudiaba y se convirtió en musa de Valentino. Su espectacular belleza y su elegancia innata fueron las mejores credenciales para abrirse un hueco en este camino que también ha elegido su hija.
Felizmente casada con Mariano Hugo, actual Jefe de la Casa Windisch-Graetz, su historia de amor fue de ida y vuelta. Se conocieron cuando eran muy jóvenes, porque sus padres eran amigos y compañeros de caza. Así, llegó a su vida cuando contaba solo 14 años. Era demasiado pronto para el amor. Cuatro años más tarde se reencontraron en una fiesta celebrada en el mítico Marbella Club, de la mano de Alfonso de Hohenlohe, y ahí sí surgió el flechazo.
Sin embargo, la relación no prosperó en ese momento. Estuvieron diez años sin verse. Cuando falleció la abuela de Sofía de Habsburgo, Mariano Hugo fue a darle el pésame y le pidió matrimonio. Unos meses después, la princesa aceptó la proposición. Y hasta ahora… Viven en un espectacular palazzo en Roma y tienen muy presente al hijo que perdieron, de quien recuerdan especialmente su sentido del humor.
De su paso por España, donde vivió diez años, ha dejado un gran número de amigos, entre otras Cari Lapique y su hermana Myriam, con quienes sigue manteniendo mucho contacto. Prima de la reina Sofía, conoce mucho más en profundidad a Felipe VI que a la reina Letizia, con quien ha coincidido en algunas ocasiones, pero por poco espacio de tiempo, y, según ha contado en una entrevista en ¡Hola!, tiene una gran admiración por Juan Carlos I, a quien considera un gran rey.
A Sofía de Habsburgo se le atribuye un tórrido romance con Philippe Junot, exmarido de Carolina de Mónaco, aunque en la mencionada entrevista ella se refiere a él como un amigo que, además, sigue conservando. De su labor como entrevistadora para esta revista del corazón española para la que trabajó una temporada destaca la inteligencia de Mick Jagger y también recuerda a Richard Gere, unos años antes del boom de 'Pretty Woman'.
Sofía de Habsburgo recibió una formación muy cosmopolita, fruto de la cual habla cinco idiomas, y pasó por distintos centros educativos en Francia y en el Reino Unido, donde coincidió con las infantas Elena y Cristina, de quienes guarda gratos recuerdos, aunque no las trató en exceso por la diferencia generacional existente entre ellas. Fueron años de alegría, de alguna travesura y de crecimiento personal e intelectual.
En cuanto a la movida madrileña y a las locas fiestas de Marbella, no probó las drogas, algo que hicieron sus hermanos. De hecho, Maximiliano está muy volcado en la Fundación Rocal para ayudar a adictos y familiares. De la ciudad de la Costa del Sol recuerda el glamour y las fiestas de una época en la que se manejaban unos códigos muy distintos a los de la actualidad.