joyas de cartier
joyas de cartier
Después de verla, por última vez en el Gran Premio de Fórmula 1 celebrado en Mónaco, Alexandra de Hannover ha vuelto a la vida pública en un acto en Madrid. Sí, la hija de Carolina de Mónaco ha viajado a España para asistir a una gala de premios que ha tenido lugar en el Teatro Real y lo ha hecho con un look al más puro estilo royal y convirtiéndose en una de las mejores vestidas de la cita.
Demostrando que promete ser una de las mujeres de la realeza más estilosas y que va a hacer la competencia a nombres importantes como el de la princesa Leonor o Amalia de Holanda, Alexandra de Hannover deslumbró en este evento con un vestido de gala precioso. Y tenemos todos los detalles.
Sin su madre ni su hermana Carlota -otro icono de estilo en el mundo royal-, Alexandra asumió de maravilla el duelo de estilo que tuvo con otros rostros conocidos como Isabel Preysler, Tamara Falcó, Paula Echevarría o Eva González. Y sí, ese punto de «sangre azul» le hizo acaparar todas las miradas frente a mujeres estilosísimas que habían elegido looks espectaculares para asistir al evento.
La joven princesa llegó acompañada de su novio, el alemán Ben-Sylvester, y ataviada con un vestido de color rosa bebé. El diseño elegido para la ocasión era un vestido de corte princesa, ajustado a la cintura y con una espectacular falda en A con mucho vulo y volumen.
Por su parte, el cuerpo de la prenda era de estilo corsé, ajustado, con un cierre de botones frontal, tirantes y un escote pronunciado y de forma redondo que iba adornado por flores en 3D. Este detalle con mucha presencia ponía el toque especial al look y hacía de él uno de los diseño más originales que le hemos visto hasta la fecha.
El vestido es de Giambattista Valli y actualmente se encuentra a la venta en versión corto. Sí, lo hemos fichado en Farfetch y es una opción que puedes adaptar al día a día y lucir en alguna noche de verano junto a unas sandalias de tacón. ¿La mala noticia? Que alcanza la cifra de los 4.000 euros.
Un diseño romántico, de estilo coquette y al más puro estilo royal que Alexandra combinó de una forma relajada y no tan formal como esperábamos de ese vestido. Añadió un bolso negro de asa corta y como complemento especial escogió unos pendientes largos brillantes de Cartier.
Sorprendió también que, en cuanto al pelo, luciera una melena con un ligero aspecto messy. Cada vez es más común ver en las alfombras rojas y en eventos del estilo cabellos que parecen que no han sido peinados, una tendencia que apuesta por lo natural y que parece que ha seguido la propia Alexandra.
La hija de Carolina de Mónaco, lejos de escoger un moño de bailarina pulido o un recogido más elaborado, apareció con su melena suelta que únicamente estaba adornada por una onda rota y abierta. Un maquillaje suave con unos labios nude rosados completaban este estilismo que tanto ha gustado.