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Como ya te hemos contado en varias ocasiones, este es el verano de los accesorios. Las tendencias han hablado y dicta sentencia y han dejado claro que un buen complemento será la clave para ir a la última y marcar la diferencia. Ejemplo de ellos son los brazaletes, los casquetes de rejilla, los zapatos con mucha presencia y sí, los cinturones.
Hoy queremos hablarte de este complemento que en la temporada estival tiene una función que va mucho más allá de sujetar, unos pantalones o marcar la figura. Y es que, este año se llevan los cinturones anchos, a la altura de la cadera y con detalles como tachuelas o agujeros que le aportan un toque sofisticado. Se llevan tanto con vestidos, con faldas o con pantalones y son mucho más fáciles de combinar de lo que piensas. Aquí te dejamos algunos ejemplos.
Cinturón de múltiples cordones con nudos de Zara con el detalle de aplicación de piezas ovaladas y abalorios metálicos. Precio: 19,95 euros.
Cinturón de piel asimétrico en color marrón con tachas de Brownie que está disponible en tres medidas. Precio: 39,90 euros.
Cinturón fino de efecto piel con chapas metálicas redondeadas grabadas de Lefties. Precio: 12,99 euros.
Cinturón ancho de Bershka con el adorno de tachas de diferentes tamaños, tejido efecto piel y hebilla cuadrada. Precio: 19,99 euros.
Cinturón de mujer de Green Coast confeccionado en 100% piel, con hebilla y adornos en piedra de color azul. Precio: rebajado a 9,99 euros.
Cinturón metalizado de cadena con círculos y aros y de color dorado. Es de Pull&Bear. Precio: 9,99 euros.
Cinturón de Hug & Clau que está confeccionado en rafia y tiene como adorna una hebilla cuadrada. Precio: rebajado a 4,99 euros.
Cinturón marrón de Stradivarius con diseño de círculos con detalles perforados y hebilla redonda metálica. Precio: 15,99 euros.
HORÓSCOPO
Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.