los más bonitos: inspiración
En verano, todas queremos aprovechar ese sabor a eternidad. Los planes se alargan todo lo posible y más. Sin embargo, no todos parecen compatibles, e ir a la playa y terminar la tarde en un beach club sin cambiarte puede parecer un reto imposible, pero no lo es cuando tienes claro los trucos que pueden ayudarte (y más de lo que crees).
La elegancia durante estos meses se vuelve más desenfadada, es lo que se le conoce como la vibra mediterránea que invita a la ligereza. Así que, juega con las capas y accesorios que transformen por completo cualquier básico playero. Un vestido vaporoso o un pareo bien elegido pueden pasar de ser ropa de baño a vestido de invitada en segundos si lo combinas con unas sandalias minimalistas, un bolso estructurado y unas gafas de sol. El pelo recogido en un moño bajo o una coleta imperfecta también añade ese punto pulido que toda transición necesita.
No se trata de llevar el armario entero, sino de seleccionar prendas con intención y darles diferentes usos. Cambiar las chanclas por sandalias de piel, añadir un collar fino o un pañuelo en la cabeza, y jugar con la luz y las texturas para que el look se vea de diez.
Las mejores ideas y básicos para ir elegante a la playa y al beach club
Conjunto de crochet. Es la mezcla ideal entre frescura y sofisticación. Permite mostrar el bañador de forma sutil y favorecedora, mientras aporta textura y estilo sin esfuerzo. Además, se seca rápido y se adapta bien al cuerpo. Diez de diez.
Vestido de crochet. Es otro imprescindible. Liviano, femenino y muy veraniego, se coloca fácilmente sobre el bikini y tiene el punto justo de transparencia para un look cuidado pero relajado. Es cómodo para caminar, estiliza la silueta y se adapta a cualquier escenario.
Caftán. El clásico caftán con sombrero nunca falla. Es ligero, holgado y fácil de llevar sobre cualquier traje de baño. Crean un aire sofisticado y veraniego que hará que te veas arreglada sin esfuerzo, perfecta para un cóctel al atardecer frente al mar.
Conjunto estampado. Un pantalón estampado con top de crochet es ideal si buscas un look más estructurado. El pantalón añade color y movimiento, mientras que el top crochet equilibra con una textura artesanal y actual. Arrasarás donde vayas.
Vestidos vaporosos. El vestido vaporoso es un acierto por su versatilidad. Se adapta a todo tipo de cuerpos, es cómodo, no marca y resulta elegante sin exagerar. Nuestro consejo es que lo lleves con unas sandalias planas.
Camisa y short. Fresco, cómodo y favorecedor, este combo permite jugar con el bañador como top, sumar accesorios y cambiar de escenario sin necesidad de pasar por casa. Además, la camisa puede llevarse abierta, anudada o como vestido, según el momento.
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