Vestidos de crochet, los más bonitos y ponibles del verano

Hay prendas que huelen a verano con solo verlas, y el vestido de crochet es una de ellas. Con esa textura artesanal que evoca lo hecho a mano (y con un encanto que nunca pasa de moda), esta pieza se ha convertido en la favorita de quienes entienden que un look puede ser relajado y sofisticado a la vez.

No importa si es largo, corto, ajustado o con vuelo. Los vestidos de crochet tienen el poder de hacerte sentir especial sin necesidad de más adornos. Además, son muy versátiles. De día, con unas sandalias planas o unas mules de piel se convierten en el uniforme perfecto para una escapada al mercado o una comida con amigas en una terraza con sombra.

De noche, bastan unos pendientes dorados, unas bailarinas elegantes o incluso unas alpargatas con cuña para que el mismo vestido tenga un aire más especial. De hecho, hay cierta sensualidad implícita en sus transparencias sutiles, en ese juego de piel y tejido que sugiere sin mostrar con el que arrasarás allá donde vayas.

Vestido midi de colores de Next, a la venta en Zalando, 71 euros. Nos gusta porque tiene la espalda al aire y porque el detalle de las flores en ganchillo es una preciosidad. Combínalo con unas palas marrones y voilà.

Vestido Crumble de Slowlove, 49,99 euros. Es bonito, veraniego y elegante. Una apuesta segura para aquellas que tienen claro que menos es más. Llévalo con un capazo de mimbre y con unas cuñas si no sabes cómo hacerlo. El look es de diez.

Vestido en punto calado con flecos de H&M, 39,99 euros. No hay nada más favorecedor que un vestido blanco que llevar con chanclas de dedo, con sandalias o con mules y un bolso de mano si buscas un toque más formal y elegante.

Vestido largo marrón de Elisbetta Franchi, 559,95 euros. Este tipo de vestidos siempre resultan una inversión porque son una prenda que siempre vuelve y que nunca pasa de moda por mucho que sí lo hagan las temporadas.

Vestido corto de colores de Apricot, a la venta en Zalando, 59,95 euros. En su estética sesentera, este vestido es una apuesta segura con la que arrasarás allá donde vayas. Además, tonos como el marrón o el dorado son ideales para combinarlo.

Vestido blanco corto de Alma en Pena, 220 euros. Es bonito, elegante y tan ponible, que resulta una inversión que llevarás con sandalias y bolsos marrones si buscas una elegancia desenfadada o con zapatos negros para un toque más formal.