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Es hora de guardar las sandalias y alpargatas de cuña y dar la bienvenida al calzado favorito del otoño e invierno: las botas y botines. Este tipo de calzado no solo protege del frío, sino que combina comodidad y estilo para sobrevivir a las bajas temperaturas sin renunciar a la elegancia.
Para esta temporada, aunque la tendencia cowboy regresa con fuerza, hay un modelo que se perfila como protagonista absoluto y que debes de fichar si quieres estar a la última. Se trata de unos botines confeccionados en piel de efecto serraje -también llamada ante o piel vuelta-, con ese toque «boho» que arrasa este otoño 2025.
En cuanto a diseño, son modelos elegantes con horma estrecha y punta triangular o ligeramente afilada, evitando el grosor típico de las botas cowboy. Otro detalle que los distingue es el tacón kitten bajito y fino, que ha triunfado en salones y sandalias y que ahora se adapta perfectamente a los botines.
Este tacón, ligeramente más grueso que el de los salones, ofrece comodidad para el día a día y aporta un aire sofisticado al conjunto. El resultado es un botín versátil y elegante, capaz de combinar con vaqueros, vestidos, faldas o incluso con un traje de chaqueta y pantalón.
En cuanto al color, el marrón y sus variantes se presentan como la opción favorita para la temporada, aunque también se encuentran alternativas en negro y otras tonalidades con detalles especiales que también combinan con todo. El resutlado son unos botines de lo más ponibles.
En definitiva, son perfectos para quienes buscan estilo, elegancia y funcionalidad en un solo calzado y son ya uno de los zapatos que más vamos a ver en los próximos meses. ¿Quieres unirte a ellos? Pues ficha cuáles son los modelos que confirman esta tendencia.
De Mango (59,99 euros).
De Zara (59,95 euros).
De Massimo Dutti (139 euros).
De Lefties (32,99 euros).
HORÓSCOPO
Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.