vivir

Coronavirus: un día en la zona cero

Así trabaja el personal sanitario en los hospitales españoles para hacer frente a la pandemia. Mientras, reciben aplausos y el reconocimiento de la sociedad y piden a la población que hagan su parte quedándose en casa.

El doctor Saldaña nos cuenta cómo están viviendo la pandemia en los hospitales. d.r.
Coronavirus: un día en la zona cero
David Saldaña
David Saldaña

Suena el busca a las 8.30 h de la mañana, ¿quién llama? Es de la UCQ, unidad de cuidados quirúrgicos, aunque ha sido reconvertida en una UCI (unidad de cuidados intensivos) para albergar a los pacientes con infección por coronavirus que requieren asistencia respiratoria. Quieren que le hagamos una traqueotomía a uno de los pacientes intubados debido al virus, que lleva mucho tiempo ingresado con ventilación asistida.

En condiciones normales se trasladaría al paciente a un quirófano para hacérsela y, en caso de no poder, se le podría realizar una traqueotomía percutánea en su misma cama de UCI, pero estamos en la tormenta perfecta. Dadas las circunstancias de epidemia, es aconsejable reducir los desplazamientos de pacientes infectados al mínimo y, además, este paciente tiene obesidad, que es uno de los factores de riesgo para infecciones graves por COVID y que impide la realización de la técnica mínimamente invasiva.

El hospital se ha tenido que reestructurar. Se ha creado una macrounidad para pacientes afectados por el virus en la que trabajan médicos de enfermedades infecciosas, medicina interna, neumología, etc. Al estar este personal sanitario dedicado al COVID, los pacientes con enfermedades diferentes, las normales en un hospital, están siendo tratados por otros médicos, aunque no sean de la especialidad correspondiente. A nosotros nos han tocado dos pacientes con insuficiencia cardíaca y un hematoma cerebral, que por cierto, por el momento están evolucionando satisfactoriamente.

Material escaso

Por otra parte, la sensación es extraña. El hospital está más vacío de lo normal. Al limitarse las visitas de los familiares hay menos gente, pero la sensación es engañosa, las UCI están casi llenas y se han dedicado plantas completas para los afectados por el virus. El material escasea y, debido a robos de mascarillas y batas durante las semanas anteriores, estas están bajo llave y hay que pedirlas a las respectivas supervisoras de enfermería cuando se necesitan.

La solución para la traqueotomía es montar un quirófano improvisado en la cama del paciente en la UCQ. Instrumental quirúrgico, cánulas, gasas, compresas, etc. Y cómo no, el personal. Para realizar esta técnica se requieren dos cirujanos y una enfermera instrumentista. Lógicamente, la medidas de precaución hacen que sea prudente reducir al máximo el personal que circula por la zona.

No es para menos. Circular por el pasillo de la UCQ da respeto incluso a facultativos con cerca de 30 años de experiencia como yo. La mayoría de pacientes, prácticamente todos, están intubados y colocados boca abajo –algo que en circunstancias normales se hace raramente– para facilitar la oxigenación del cuerpo.

La preparación no es cosa fácil. Se comienza por la colocación del gorro y dos mascarillas, la de debajo, normal y por encima una FFP2, más segura. Después las calzas, el lavado de manos habitual, la colocación de la bata impermeable y los guantes, dos pares, uno encima del otro. La enfermera instrumentista tiene cara de preocupación. Está casi recién contratada y le ha tocado. Los trajes de protección como los que vemos en China por televisión o en las películas no están disponibles en el hospital.

Respeto sí, miedo no

Puede que se pregunte si los médicos tenemos miedo en estas circunstancias. Ayer había 180 médicos del hospital de baja y uno ingresado en la UCI, diagnosticados de COVID o con sospecha, por no hablar del resto de personal del cual desconozco los datos. No puedo hablar por mis compañeros pero yo tengo inquietud por mi familia y amigos, pero miedo no.

Personalmente ya he vivido más epidemias como la de tuberculosis multiresistente, en el año 1997, que provocó la muerte de médicos y enfermeras y he operado a pacientes con capacidad de contagio con hepatitis o VIH. Es algo que la mayoría hemos hecho. Además es nuestro trabajo y nuestro deber moral. Todos los días en cualquier hospital mueren personas pero no salen en los medios. Muchas gracias a todos los ciudadanos que aplauden en sus ventanas y nos dan las gracias a diario.

HORÓSCOPO

HORÓSCOPO

Sagitario

Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.