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PICOS DE GLUCOSA

Cómo saber que tienes los niveles de azúcar en sangre altos: las señales que da tu cuerpo

No siempre es fácil detectar una diabetes tipo 2, por eso tiene que estar atento a las señales que te envía tu cuerpo.

El cuerpo da señales de que tiene el azúcar demasiado alto. Imagen: Instagram @oysho

El cuerpo utiliza la glucosa para producir energía. Este tipo de azúcar circula por el torrente sanguíneo y su nivel fluctúa a lo largo del día en función de diferentes variables, como la alimentación y el ejercicio físico. Es normal que la mayoría de las personas experimentemos picos de glucosa a lo largo del día, pero cuando el azúcar en sangre es elevado de manera constante, podemos estar ante una diabetes tipo 2.

La diabetes tipo 2 puede desarrollarse de manera gradual y tardar años en ser diagnosticada, ya que sus síntomas suelen aparecer de forma progresiva. Por ello, es fundamental prestar atención a las señales que da el cuerpo para identificar posibles indicios de la enfermedad y tratarla a tiempo.

Síntomas de que sufres diabetes, aunque no lo sepas

Aumento de la sed: los riñones de las personas diabéticas tienen que trabajar más para filtrar el exceso de glucosa. Cuando sus capacidades llegan al límite, esta es expulsada junto con la orina, arrastrando los líquidos de los tejidos y produciendo la sensación de deshidratación.

Aliento afrutado: cuando hay un déficit de insulina, las células dejan de recibir glucosa y recurren a las reservas de grasa, que son descompuestas por el hígado y transformadas en unas moléculas denominadas cetonas. Las cetonas se eliminan mediante la orina y la respiración, motivo por el cual el aliento de algunas personas con diabetes se vuelve más dulce o agrio.

Visión borrosa: un alto nivel de azúcar en la sangre afecta a los líquidos presentes en los tejidos, incluídos los cristalinos. Esto genera hinchazón y perjudica la capacidad de focalizar la vista. Un problema que puede ser grave porque puede desembocar en la pérdida de visión a largo plazo.

Ganas de orinar: como consecuencia directa de la polidipsia (aumento de la sed), las ganas de miccionar que sienten los pacientes se incrementan de manera sustancial. Por tanto, si una persona bebe más de lo habitual, también irá al baño más veces de las habituales (poliuria).

Detectar esta señales es clave para poner freno a la diabetes. Imagen: Instagram @oysho

Fatiga o cansancio: como el cuerpo pierde su capacidad de utilizar la glucosa para generar energía, los pacientes con diabetes suelen estar cansados con bastante frecuencia. Por otro lado, como los pacientes que sufren poliuria pierden grandes cantidades de líquidos, pueden acabar con deshidratación, aumentando así su debilidad.

Pérdida de peso involuntario: los pacientes con diabetes pierden una cantidad considerable de calorías a través de la orina. Además, como sus células no obtienen la glucosa que necesitan, queman las reservas de grasa, lo que se traduce en una disminución del peso muy acelerada.

Hormigueo o entumecimiento en las manos o los pies: un nivel elevao de glucosa incide de manera directa en el funcionamiento de los nervios, causando la pérdida de sensibilidad en manos y pies. Llegado el caso, puede incluso provocar dolor.

Infecciones frecuentes: la diabetes mina la capacidad del organismo para luchar contra los gérmenes, lo que incrementa el riesgo de infección, sbre todo, en las zonas más sensibles, como las encías, que pueden sangrar e inflamarse, favoreciendo las enfermedades periodontales.

Cicatrización lenta: si el nivel de glucosa es muy alto, el flujo sanguíneo será más deficiente, por lo que los procesos de curación y cicatrización que lleva a cabo el cuerpo de modo natural se ralentizan. Este fenómeno es muy visible en los pies, donde se producen con frecuencia úlceras del pie diabético.

Incremento del apetito: la pérdida de calorías a través de la orina y el problema para que la glucosa llegue a las células provocan una sensación de hambre continua en las personas con diabetes. Esta afección se conoce como polifagia, y los pacientes que la experimentan no consiguen calmar su apetito por mucho que coman.

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