Los tres trucos del nutricionista Pablo Ojeda para perder peso con éxito

Ana Pizarro Publicado · 22 de enero de 2025, 07:52 h

Después del atracón de las navidades, comienza a los que muchos se refieren como 'la Cuesta de enero'. Unas semanas en las que la alimentación saludable estará más presente que nunca, como también lo estará el ejercicio físico y la intención de comenzar una nueva vida en la que las rutinas sanas con nuestro cuerpo estén más presentes que nunca.

Es cierto que, según datos de diversos informes y estudios, esta buena intención suele durar unos meses e, incluso, en muchos casos no pasa de unas semanas. Que después, dicen, son pocos los que logran mantener unos buenos hábitos que, sin embargo, deberían ser el pilar imprescindible de la vida de todos; sobre todo, si lo que queremos es llevar una salud lo más correcta posible a lo largo de nuestra vida y llegar bien a la vejez.

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De acuerdo a la psicóloga Angela Duchworth, de la Universidad de Pennsylvania, uno de los motivos principales es que, en muchas ocasiones, para cumplirlos las personas tienen que renunciar a comportamientos ya arraigados en el tiempo y eso es, precisamente, lo que más cuesta abandonar.

Además de los estudios y los informes, los profesionales de la salud también conocen que las buenas intenciones, a veces, tardan mucho en llegar y muy poco en marcharse. Por eso, cada vez son más los que dan algunos tips y consejos que pueden evitar que, precisamente, esos buenos hábitos de alimentación y ejercicio se vayan la primera o la segunda semana de febrero. Es el caso de Pablo Ojeda, un reconocido nutricionista que da tips y claves en redes sociales y en algunos programas de televisión. Consejos sobre alimentación saludable, ejercicio físico y vida activa que viene bien tener sobre la manga. Y ahora, aprovechando los días después de la Navidad, ha hablado en Las Mañanas de Kiss FM de las claves para conseguir que esos kilos que algunos hemos ganado con comilonas y cenas, se vayan y no regresen nunca.

Antes de nada, conviene recordar que, según Pablo Ojeda y muchos otros profesionales de la salud, las prisas no son amigas de una pérdida de peso saludable. Que hay que ir despacio, tener paciencia, ir introduciendo poco a poco en la rutina hábitos saludables y confiar en el proceso.

Pablo Ojeda tiene claro que si hay que hacer algo, es fijarse y tener en cuenta tres claves bien diferenciadas: hidratación, alimentación y ejercicio físico. Siendo totalmente consciente de las tres y variándolas después de Navidad, podemos conseguir perder peso de forma saludable (pero sin las prisas de hacerlo en una semana).

En cuanto a la hidratación, el nutricionista insiste en que las semanas después de Navidad son las ideales para volver a beber buenas cantidades de agua. «Hay que volver a normalizarlo todo», dice. Y es que, durante las fiestas, es más fácil beber otras bebidas copiosas y no hidratarse como es debido.

Eso sí, también hay que tener claro que beber agua no es tomar cada día dos litros y medio, pues esta afirmación no es más que un mito. «No hay una fórmula única para todos; la mayoría de las personas sanas pueden mantenerse hidratadas bebiendo agua y otros líquidos cada vez que sientan sed. Para algunas personas, menos de ocho vasos al día puede ser suficiente; pero otras personas pueden necesitar más», indican los profesionales de Mayo Clinic, a la vez que informan de que el ejercicio, el entorno e, incluso, la salud en general, pueden afectar a la necesidad de agua que necesitamos tomar cada persona.

Beber agua, además de ayudarnos a liberar toxinas e hidratarnos desde el interior, nos ayudará a aumentar la sensación de saciedad y, por ende, a evitar picar entre horas.

Diego Ojeda también ha hablado de lo que debemos comer si queremos perder peso de forma saludable: «Alimentos muy altos en fibra, para ayudar a nivelar la glucosa en sangre», informa. Ya te hemos hablado alguna vez de los picos de azúcar en sangre después de comer, que hacen que nos entre hambre a la mínima de cambio. «Tomar hidratos de carbono complejos, como los famosos alimentos integrales, es perfecto para liberar la energía muy poquito a poco, haciendo que sean muy sostenibles en el tiempo«, explica este profesional. Además de ayudarnos a liberar toxinas, estos alimentos conseguirán que esos picos de azúcar después de comer no sean muy acusados y, por ende, las digestiones sean más lentas.

Y ahora llega la clave más importante de todas: el ejercicio físico. «Es necesario»; dice Ojeda. Ahora bien, uno de los factores que hacen que la mayoría de las personas abandonen la rutina del ejercicio físico a las pocas semanas de ponerse con ella es, precisamente, «pegarse palizas», como él dice.

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«Si no haces ejercicio, tus huesos, tus articulaciones y tu corazón no están acostumbrados a un exceso de ejercicio y, por tanto, tienes más posibilidades de dejarlo antes», explica el profesional. Por eso, recomienda que las personas sanas se muevan en frecuencias cardiacas: «Mantenerse de 120 a 125 pulsaciones por minuto«, dice. »Está demostrado que un ejercicio sostenido a esa pulsación quema más grasa que un trabajo de alta intensidad con el corazón a tope«, explica.

Además, pide paciencia: «Si te mantienes sostenido a esa pulsación, vas a conseguir que el cuerpo te vaya pidiendo más ritmo poco a poco con el paso del tiempo», así que pide confiar.

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