FITNESS A PARTIR DE LOS 50
FITNESS A PARTIR DE LOS 50
El paso de los años tiene una víctima clara en el cuerpo de la mujer: los tríceps. Este músculo situado en la parte posterior del brazo, tiende a descolgarse por la falta de tono muscular y de colágeno, además de un aumento de la grasa en determinadas zonas. Las temidas alas de murciélago suelen hacer su aparición a partir de los 50, lo que nos lleva a ejercitar los tríceps como si esa fuera la única solución.
Pero lo cierto es que fortalecer únicamente esta zona de los brazos, puede ser un error si no lo acompañas de otros ejercicios que trabajen el resto de músculos. Y es que los brazos no sólo constan de tríceps, aunque sea el músculo que se descuelga con la edad, sino que también tiene bíceps, deltoides, trapecio, romboides, serrato y antebrazo.
De hecho, fortalecer toda la musculatura de los brazos, es un indicador de salud y de calidad de vida, puesto que de su buen estado dependerá tu independencia diaria cuando los años comiencen a pesar. Además, diversos estudios han vinculado la fuerza de agarre a un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias así como a menor probabilidad de sufrir dolencias crónicas.
Es por eso que, para tener una mejor salud (y que no se te descuelguen los tríceps), tienes que trabajar todos los brazos en su conjunto. Esto no significa que tengas que ponerte a levantar pesas, sobre todo si nunca lo has hecho antes. Puedes trabajar todos los músculos de los brazos desde tu casa y sin material, únicamente con el peso de tu cuerpo.
1. Flexiones: este ejercicio tan común trabaja pectoral, tríceps y hombros. Túmbate en el suelo boca abajo y eleva el cuerpo sujetando el peso con las palmas de las manos y las puntas de los pies. Las manos deben estar debajo de los hombros y los pies ligeramente abiertos. Desde esta posición, flexiona los codos bajando el cuerpo hasta que el pecho roce el suelo manteniendo todo el cuerpo recto y vuelve a la posición original.
2. Círculos de brazos o elevaciones lentas: este ejercicio tan sencillo tonifica hombros y tríceps. Sitúate de pie con los pies ligeramente abiertos y abre los brazos a ambos lados del cuerpo hasta que queden paralelos al suelo a la altura de los hombros formando una cruz. A continuación, haz círculos pequeños con los brazos hacia adelante o hacia atrás o sube y baja lentamente.
3. Remo invertido: esta variante del remo trabaja el dorsal, el bíceps y el deltoides. Puedes hacerlo en el gimnasio, pero si lo quieres hacer en casa, sólo debes tumbarte bajo una mesa baja, sujetándote al borde de la misma con ambas manos abiertas a la anchura de los hombros. A continuación, flexiona los codos para llevar el pecho hasta la mesa, regresando después a la posición inicial.
4. Fondos de tríceps en el suelo: es un ejercicio perfecto para tonificar la parte posterior del brazo. Siéntate en el suelo con las rodillas flexionadas y los pies apoyados en el suelo y abiertos. Debes colocar las manos detrás del cuerpo y, desde esta posición, empujar con los brazos para subir hasta formar una línea recta con el cuerpo antes de bajar a la posición original.
5. Plancha con toques de hombro: realizar este ejercicio estimula hombros y tríceps. Colócate en posición de plancha alta, con las palmas de las manos apoyadas en el suelo justo debajo de los hombros, las puntas de los pies separadas ligeramente y el cuerpo completamente recto. Desde esta posición, toca alternativamente cada hombro con la mano contraria.