Perder peso con la cinta de caminar: aprende todos los trucos para quemar más calorías en menos tiempo

Si estás inmersa en una «operación kilo», es posible que hayas probado todo tipo de entrenamientos HIIT y técnicas para perder peso. Sin embargo, los métodos más simples suelen ser los mejores. Por ejemplo, se ha demostrado que caminar en una cinta tiene un enorme beneficio para perder peso.

Un estudio publicado en la Revista Turca de Medicina Física y Rehabilitación encontró resultados sorprendentemente buenos con algo tan simple como caminar. El estudio sometió a 28 mujeres con sobrepeso y obesidad a un programa de ejercicio de 12 semanas usando la cinta de andar y encontró «mejoras significativas en la obesidad abdominal». Así que ya lo sabes: ¡funciona!

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El término de grasa abdominal es muy interesante: si ha estado buscando respuestas sobre cómo conseguir una cintura delgada, sabrás que es extremadamente difícil reducir la grasa en áreas específicas del cuerpo. Resulta que algo tan simple como caminar en cinta puede adelgazar la sección media, esa que tanto molesta.

Por supuesto, puedes obtener los mismos beneficios caminando al aire libre. Se sabe que pasar tiempo en parques y entornos naturales reduce la producción de cortisol, la «hormona del estrés», que anima a tu cuerpo a aferrarse a la grasa cuando se produce. Sin embargo, la cinta de correr tiene una ventaja muy significativa sobre una caminar al aire libre: la capacidad de personalizar y registrar tu entrenamiento.

Además de ser una máquina cardiovascular versátil, una cinta de correr puede ayudarte a perder peso si ese es tu objetivo. Con varios extras muy suculentos: puedes utilizar la cinta de correr durante todo el año, es posible ver tu programa de televisión favorito mientras haces ejercicio y tiene pasamanos, lo cual es ideal si te estás recuperando de una lesión.

Al igual que con cualquier ejercicio cardiovascular que bombee el corazón, también puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y otras enfermedades crónicas, mejorar el sueño, mejorar el estado de ánimo y mejorar la función cerebral. Y es accesible para todos los niveles de condición física.

El entrenamiento en intervalos de alta intensidad (HIIT) implica alternar series de ejercicio de alta intensidad y descanso. La idea es trabajar muy duro durante períodos cortos y descansar entre las ráfagas de ejercicio de alta intensidad. Esto quema muchas calorías, lo que ayuda a contribuir a la pérdida de peso.

Para hacer HIIT en una cinta de caminar, calienta durante 5 minutos y luego corre a tu velocidad máxima durante 30 segundos. Camina vigorosamente durante 60 segundos, repite de 5 a 10 veces y finalmente camina a otros 5 minutos para enfriarte. Para un entrenamiento más avanzado, alterna entre trotar y correr. También puedes agregar más minutos a cada serie de alta intensidad. Lo ideal es que tus intervalos de descanso sean el doble de largos que tus intervalos de alta intensidad.

Otra estrategia para perder peso en la cinta de caminar es cambiar su rutina. Al hacer un entrenamiento diferente cada vez, podrás reducir el riesgo de sufrir lesiones. Repetir el mismo entrenamiento es estresante para las articulaciones. Aumenta el riesgo de sufrir lesiones por uso excesivo, lo que puede hacerte retroceder. Evita una meseta de entrenamiento. Cuanto más hagas un determinado ejercicio, menos resultados verás. Tu cuerpo necesita ser desafiado a progresar. Es más probable que sigas tu rutina si combinas regularmente tu entrenamiento.

Para hacer que una rutina en la cinta de caminar sea más desafiante, agrega pendientes. Caminar a paso ligero o correr en una pendiente quema más calorías porque el cuerpo tiene que trabajar más duro. También activa más músculos, lo que contribuye a desarrollar más masa muscular magra. Esto te ayuda a perder peso, ya que el músculo quema más calorías que la grasa.

Si deseas hacer ejercicio en una pendiente, prueba esta secuencia en la cinta de correr. Empieza caminando 5 minutos para calentar. Establece la inclinación al 1 por ciento. Trota durante 1 minuto. Aumenta la inclinación en un 1 por ciento cada minuto. Repite hasta alcanzar una inclinación del 8 al 10 por ciento. Luego disminuye la inclinación en un 1 por ciento cada minuto. Repite hasta que tengas una inclinación del 0 al 1 por ciento. Finalmente, camina durante 5 minutos para enfriarte.

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