para comer tras ver la mezquita
para comer tras ver la mezquita
A un mes de que la ciudad luzca su cara más atractiva y vistosa en el Festival Flora, y con el otoño como una estación perfecta para conocerla, gracias a sus suaves temperaturas, esta semana nuestras recomendaciones culinarias se centran en los mejores restaurantes de Córdoba, ideales para disfrutar de su patrimonio gastronómico y su cocina tradicional, de la mano de sus reconocidos chefs.
Precisamente hace unos días se ha confirmado que será Paco Morales, el chef cordobés con dos estrellas Michelin, el encargado de elaborar la cena oficial del Consejo Europeo que se celebrará en La Alhambra el próximo 5 de octubre. El más conocido de los representantes de la cocina cordobesa, fundamental en la gastronomía andaluza y por ello, la española.
Si te planteas una escapada antes de que llegue la Navidad, Córdoba es un destino perfecto, no solo por los monumentos y espacios declarados Patrimonio Mundial, también por su cultura gastronómica, que cuenta con el mejor producto en las manos que más saben. Estos son nuestros restaurantes favoritos de Córdoba.
En los límites orientales de su mítica y alabada Judería se encuentra Garum 2.1, referencia gastronómica para los que más conocen la cocina cordobesa, los propios cordobeses. Y es que es imposible permanecer impasible al delicioso salmorejo amontillado (la foto bajo el titular) que elabora su chef, Juan Luis Santiago, para algunos el mejor salmorejo del mundo.
Su apuesta por la cocina tradicional cordobesa es innegable, pero siempre hay espacio para la fusión con otros elementos de la gastronomía de nuestro país, con productos de temporada y un saber hacer en los que el objetivo es la satisfacción del cliente. Como la que uno siente cuando prueba sus Kokotxas de bacalao al pil-pil con riñones de cordero asados. Sobre el papel podría ser un matrimonio imposible, pero en boca resulta la más perfecta de las uniones.
Arrancar la velada con una tosta de boquerones con crema de anchoa y tuétano ya es un delicioso adelanto de lo que podemos esperar de la cocina de Santiago, que propone al cliente platos como los buñuelos de bacalao a la naranja o el galardonado pulpo con oreja ahumados y postres como la deliciosa torrija caramelizada con sopa de mandarina y helado de canela.
Un servicio atento y dedicado y un maridaje compuesto por caldos andaluces seleccionados con esmero complementan a la perfección una experiencia culinaria que el comensal solo querrá recomendar y repetir, recomendar y repetir una y otra vez.…
En el barrio de El Naranjo, muy cerca del parque de la Asomadilla, el tercero más amplio de Andalucía, se encuentra ReComiendo, el proyecto gastronómico del chef Periko Ortega. Un lugar que pasa desapercibido desde el exterior pero que tras su enorme y pesada puerta de entrada esconde un universo culinario lleno de agradables sorpresas e inesperados juegos.
Antes de pasar a la mesa el equipo de Ortega ya nos deja entrever que ReComiendo no es un restaurante como otro cualquiera y la experiencia que estamos a punto de vivir se va a parecer a otra. Nuestra cita con el chef cordobés comienza con aperitivos que a través de la imaginación y los trampantojos nos permiten disfrutar de algo como el chorizo y el huevo con patatas convertidos en pasta dentro de un tubo como el del dentífrico.
Tras saborear nuestros recuerdos, y recordar que «nada es lo que parece» pasamos a la mesa, donde nos aguardan platos como la mazamorra, el plato más antiguo de Córdoba, el jamón ibérico de bellota (que degustamos convertido en líquido), la corvina o el cochinillo, acompañados y elaborados de forma impecable.
Con la imaginación y la memoria como constante de toda la experiencia, en los postres, volvemos a ser niños. Y podemos jugar con la comida (foto de arriba), como siempre nos negaron nuestros padres, culminando esta original y elaborada experiencia con el cierre más dulce posible y el mejor sabor de boca.
Muy cerca de los límites de La Judería está la Ermita de la Candelaria, un restaurante que apuesta por el producto de la tierra, y de temporada, para ofrecer a sus clientes una cocina tan tradicional como impecable. Platos como el puerro confitado con lubina marinada y salmorejo, la alcachofa confitada en AOVE con velouté de hierbabuena y jamón de los Pedroches comparten carta con elaboraciones más tradicionales como el rabo de toro o el bacalao al pil-pil.
Y lo hacen equilibradamente, demostrando el saber hacer de una cocina con experiencia que tiene claro que su misión final es lograr la satisfacción del cliente. Que lleven seis años abiertos, atendiendo a turistas y locales es una excelente prueba de que lo consiguen con creces.
Desde 1964 Bodegas Campos es un lugar de paso obligado en Córdoba, y así lo confirman las firmas que personalidades como Tony Blair, Carmen Sevilla o la Duquesa de Alba dejaron en sus botas de roble americano, muestra de su pasado bodeguero. En el entorno único que conforman sus comedores podemos disfrutar de una carta tradicional llena de clásicos que gustan a todo el mundo.
De los ibéricos artesanales a los entrantes fríos que no pueden faltar en nuestra visita a la ciudad pasando por fritos como las croquetas o los flamenquines y propuestas con denominación de origen como los callos, pata y morro de vaca retinta a la cordobesa, Bodegas Campos es la cita ineludible que el visitante tiene con Córdoba y con la historia de su cocina.
Para cerrar nuestra visita, uno de los últimos locales en sumarse a la oferta gastronómica de la ciudad de la mano de uno de sus más reconocidos representantes, Paco Morales. Con otros establecimientos en la ciudad, en este local Morales se adentra en la cocina más tradicional y reconocible para ofrecernos sus versiones de grandes clásicos.
El bocatín de calamares, las croquetas de pollo asado, la papa aliñá con gamba blanca, las patatas bravas o los flamenquines son algunos de los platos que aparecen en su carta, tan sencilla como vistosa. Una propuesta infalible de la mano de uno de los que más saben, para que sigamos disfrutando de los grandes sabores que tiene el patrimonio gastronómico de Córdoba.