Viaje al corazón de Jane Austen: los escenarios de Orgullo y Prejuicio, la adaptación de su mejor novela

A menos de un mes de que se celebre en Bath el festival que rinde homenaje a una de las escritoras inglesas más conocidas de todos los tiempos, tal vez es buen momento de rendir nuestro propio homenaje a Jane Austen viajando a los escenarios de Orgullo y Prejuicio, la adaptación de su mejor novela. Porque además de disfrutar de una meteorología más fresca, podremos contemplar paisajes de ensueño y mansiones inolvidables como las que vemos en la película que acaba de cumplir 20 años.

«No hay condado más bello en Inglaterra que Derbyshire», escribió la novelista del siglo XIX en su reconocida novela. Y aunque los expertos en Austen señalan que no existen pruebas de que visitase el mencionado condado, lo cierto es que la localización de la historia de amor de Elizabeth Bennet y el señor Darcy juega un papel fundamental en la misma, especialmente en la última adaptación cinematográfica.

A falta de viajes, todo parece indicar que la autora de Persuasión y Sentido y sensibilidad leyó revistas de la época que hacían descripciones contemporáneas sobre el condado, una zona muy turística en la época georgiana, antes de sentarse a escribir. Es una pena que ella no pudiese ver con sus propios ojos esos paisajes, los escenarios de Orgullo y Prejuicio y los lugares en los que se ambientó su mejor novela.

Una de las localizaciones más impresionantes de la película es esta joya arquitectónica de Inglaterra que hizo las veces de Pemberley, el hogar del adinerado Sr. Darcy. Casi 8 kilómetros cuadrados de terreno a orillas del río Derwent en los que ciervos, ovejas y animales salvajes viven junto a la mansión de la familia Devonshire. En ella se encuentra una de las colecciones de arte privadas más importantes de Europa.

Con una galería de esculturas similar a la que visitó Elizabeth Bennet, el busto del señor Darcy se ha colocado, como recuerdo del rodaje, en la tienda de regalos (pero no está a la venta). La propiedad puede visitarse desde mediados de marzo hasta diciembre y, en junio, realizan una proyección al aire libre de la película protagonizada por Keira Knightley y Matthew Macfadyen.

Esta casa de campo propiedad de la familia Manners desde hace 900 años hace las veces del albergue de Lambton en la película. Quienes han tenido el placer de visitarla, dicen que pasearse por sus jardines isabelinos es como retroceder en el tiempo, gracias también a su arquitectura medieval (la parte más antigua de la edificación es del siglo XII). En la película aparecieron su salón de banquetes revestido de madera y el salón, que la ficción convirtió en el dormitorio de Elizabeth Bennet.

Para los más fanáticos, se organizan tour cinematográficos con expertos que han estado en los sets de rodaje de Orgullo y prejuicio y otras películas que han rodado en el edificio, además de talleres y eventos que van desde sesiones de arte y manualidades a paseos ecológicos.

Cualquier fan de la adaptación de la novela de Jane Austen que hizo Joe Wright tiene grabado en la memoria ese precioso lugar en el que una agitada Elizabeth Bennet contempla la inmensidad y la belleza del Peak District. Esta formación rocosa, de piedra arenisca, ofrece una bonita panorámica de la zona. El paso del tiempo, y la popularidad de la película, ha hecho que sean muchos los que pregunten por el lugar que aparece en la secuencia como «la roca de Keira Knightley».

Lejos de Derbyshire también se rodaron varias escenas de la película, especialmente en interiores, aprovechando el rico patrimonio arquitectónico que se puede encontrar en Inglaterra.

La imponente propiedad de Lady Catherine de Bourgh en Orgullo y prejuicio es, en realidad, una espectacular construcción del siglo XVI que pertenece al linaje de los marqueses de Exeter, el primero de los cuales se remonta a Isabel I. Ejemplo destacado de la arquitectura isabelina en el exterior, sus interiores y sus estancias anexas, así como el parque y los establos, fueron renovados por Lancelot Brown, considerado el padre de la jardinería paisajista inglesa.

Entre sus espacios más emblemáticos se encuentra la Heaven Room, pintada por el artista italiano Antonio Verrio entre 1697 y 1699, considerada una obra maestra de la pintura barroca.

El templo de Apolo en el que el señor Darcy hace su primera propuesta de matrimonio se encuentra, en realidad, en el sur de la ciudad de Bath, a kilómetros de su casa en la ficción. Erigido en 1765 cerca del puente palladiano, en su conjunto son conocidos por formar parte de uno de los jardines más bellos de Inglaterra. Cincuenta años antes el rico banquero Henry Hoare compró la finca a la familia Stourhead, que vivía allí desde hacía siete siglos.

Hoare ordenó destruir el antiguo castillo y se construyó un edificio de estilo neoclásico y fue su hijo, Henry Hoare II, el que se encargó de diseñar el jardín, al que dedicó cuatro décadas de su vida. Fue donado al National Trust después de la II Guerra Mundial, cuenta con una biblioteca que alberga más de cinco mil libros de la época de la regencia y entre los rodajes que se han llevado a cabo allí está el Barry Lyndon de los años 70, Doctor Who o la miniserie A la caza del amor.

Esta mansión de estilo neoclásico es, en la película, el Netherfield Park del Señor Bingley. Construida, a orillas del Támesis, entre 1776 y 1783 por el arquitecto John Carr, su dueño era el baronet Francis Sykes, que hizo fortuna en la Compañía de las Indias. Sin embargo, en el siglo XIX se vieron obligados a vender la propiedad al político James Archibald Morrison quien, con diez hijos a su cargo, no dudó en realizar obras de reacondicionamiento a cargo del arquitecto John Buonarotti Papworth.

En 1910 murió la última hija de Morrison, y la propiedad fue requisada por el gobierno británico durante las dos guerras mundiales. Posteriormente el Waldorf Astoria de Nueva York compró uno de los salones de la mansión y trasladó hasta allí las paredes, los espejos y las chimeneas de la época. En 1952 fue renovada por lord y lady Iliffe, quienes la donaron al National Trust en 1978.