Cómo superar el miedo al fracaso para que no te paralice

El miedo es una emoción completamente natural cuya función es protegerte del peligro. Tener miedo al fracaso puede ser incluso positivo porque si no lo tuvieras podrías asumir riesgos demasiado peligrosos para tus capacidades. El problema comienza cuando este miedo te desborda y te paraliza.

Las personas con mucho miedo al fracaso tienden a anticipar, imaginándose escenarios futuros muy negativos, lo que les hace no emprender ciertas acciones para no fracasar. Por otro lado, en el miedo al fracaso influyen una baja autoestima, la creencia de que no los vas a hacer lo suficientemente bien, una baja autoconfianza y un alto perfeccionismo.

Además, según aseguran los expertos de Avance Psicólogos, tienden a ser personas muy autocríticas y autoexigentes que no son capaces de iniciar algo nuevo por el temor a que no les salga perfecto. Esto hace que se estanquen, lo que disminuye aún más su autoestima, sintiendo una gran insatisfacción y angustia con la vida.

Es normal tener miedo y completamente imposible eliminarlo. En lugar de pensar en acabar con el miedo para empezar a hacer las cosas que te lo provocan, los expertos recomiendan aprender a convivir con él para que no vaya por delante de ti y te impida hacer lo que quieras.

Las personas con miedo al fracaso suelen ser muy perfeccionistas, lo que les lleva a estancarse al pensar que no van a hacerlo bien a la primera. Por eso, una nueva forma de empezar a superar el miedo al fracaso es no haciendo todo a la perfección. Los expertos de Avance Psicólogos te recomiendan hacer aquellas actividades que sabes que no te van a salir bien, para exponerte a este miedo poco a poco.

Es muy importante que rebajemos las expectativas. El miedo al fracaso viene muchas veces de imaginarnos situaciones en las que todo es idílico y, claro, para llegar a ese escenario tendríamos que hacer muchos esfuerzos, sacrificios y que, además, la suerte estuviera de nuestro lado.

Tener éxito no te exime de pasarlo mal y fracasar en algo tampoco es el fin del mundo. «El éxito no es la perfección y el fracaso puede traer consigo otras cosas, como, por ejemplo, un aprendizaje«, dicen desde Avance Psicólogos. No hacer las cosas por miedo a que te salgan mal sólo te lleva al estancamiento.

La motivación puede ser intrínseca (cuando algo me motiva porque me refuerza emocionalmente) o extrínseca (cuando algo me motiva porque me refuerza externamente). A pesar de que cualquiera de las dos motivaciones pueden ayudarte, la intrínseca es la más potente.

El diálogo interno es muy importante para que afrontes las situaciones con valentía y ganas. Si piensas que no eres capaz de hacer algo determinado, lo más probable es que ni siquiera lo intentes. Por eso debes aprender a hablarte con amabilidad para no ser tu propio límite.

Las personas perfeccionistas y con miedo al fracaso se rinden muy fácilmente porque piensan que las cosas deberían salirles a la primera. No todo tiene por qué salir fácilmente, por lo que deberías seguir intentándolo hasta que te salga y no identificar el primer obstáculo como un fracaso.

«Aceptar tus capacidades y tus límites te permitirá llevar el error con más entereza, perspectiva y relativización«, dicen los expertos de Avance Psicólogos. Sí, puedes equivocarte o no hacer las cosas de la mejor manera posible, pero estos errores te permitirán aprender para futuras ocasiones.