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Tom Ford: juegos de cámara

Su éxito como director de 'A single man' no fue una casualidad. Ahora vuelve al cine con 'Animales nocturnos', un drama noir, esteticista y perverso.

Amy Adams en una escena en la galería de arte junto a Tom Ford, director y guionista de 'Animales nocturnos'. d. r.
Tom Ford: juegos de cámara
Rosa Gil

Tom Ford no es el único diseñador con inquietudes artísticas más allá de la moda, pero sí el que más ha profundizado en su pasión alternativa. Hace siete años conquistó a la crítica y al público con su ópera prima, la honesta y demoledora 'Un hombre soltero' (A single man), que le alzó con una copa Volpi, un BAFTA y una nominación al Oscar, todos ellos para Colin Firth, el angustiado protagonista de la cinta.

Pero el creador aún tenía mucho que decir, y el 2 de diciembre estrena 'Animales nocturnos', un oscurísimo thriller basado en la novela 'Tres noches', de Austin Wright (editada en España por Salamandra), que llega a nuestras pantallas avalado por el gran premio de jurado del Festival de Venecia. En un elaborado juego metaliterario, la película nos presenta a una exitosa galerista de arte -que lee la novela que le envía su ex marido. La historia leída y la vivida por la protagonista se entremezclan en una reflexión sobre la vacuidad de la vida privilegiada, los límites entre amor y crueldad y la fina línea entre redención y venganza.

Con una puesta en escena de líneas puras y frías, y un vestuario (por supuesto) impecable, brillan en el reparto Jake Gyllenhaal, Aaron Taylor-Johnson, Isla Fisher y Michael Shannon (Revolutionary Road, Boardwakl Empire), un secundario cuyo nombre empieza a sonar con vistas a los Oscar.

Cartel de la película 'Animales nocturnos'. D. r.

HORÓSCOPO

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Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.