GRAN SALTO POLÍTICO
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Era muy posible que así sucediera, porque Teresa Ribera estaba en todas las quinielas, pero ha habido que esperar a que Ursula von der Leyen lo comunicara. La responsable del ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico en el actual gobierno de coalición de Pedro Sanchez, será a partir de ahora vicepresidenta de Transición Justa, Limpia y Competencia de la Comisión Europea. Se trata de un cargo de suma importancia en el Gobierno comunitario que hasta ahora ostentaba Margrethe Vestager.
Hace dos años, Teresa Ribera ya dejó claro en Santander WomenNOW cuál es su actitud a la hora de abordar cuestiones como el liderazgo que nos pueden dar una pista de cuáles son las directrices que seguirá en este nuevo puesto: «La capacidad de trabajar en conjunto es lo más importante en esta década turbulenta. Es raro, extremadamente raro que cualquier transformación dependa de solo una persona por muy líder y carismática que sea, depende sobre todo de la capacidad de sumar voluntades y de la capacidad ilusionante en torno a un proyecto».
Nacida el 19 de junio de 1969, Teresa Ribera es licenciada en Derecho por la Universidad Complutense y diplomada en Derecho Constitucional y Ciencia Política por el Centro de Estudios Constitucionales. Asimismo, pertenece al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado desde 1995 y ha ejercido como profesora de Derecho Público y Filosofía de Derecho en la Universidad Autónoma.
Además, ha sido miembro de distintos consejos asesores: el consejo de Liderazgo Global de la United Nations Sustainable Development Solutions Network (UNSDSN), el consejo asesor global en cambio climático del Foro Económico Mundial, y el de la iniciativa Momentum For Change de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC). También conviene recordar que estuvo al frente de la Secretaría de Estado de Cambio Climático durante el segundo mandato de José Luis Rodríguez Zapatero.
Hay que destacar que Teresa Ribera está muy unida a su familia y, de hecho, en una entrevista publicada por el PSOE, con motivo de su candidatura como cabeza de lista en las últimas Europeas, manifestaba a quiénes llamaría si su partido ganaba los comicios: «Seguramente, a mi familia. A los que más cerca están de mí siempre: mi padre, mi madre (profesora muchos años en la Institución Libre de Enseñanza), mis hijas y mi marido».
Teresa Ribera es hija de José Manuel Ribera, que fue presidente de la Sociedad Española de Geriatría, con una brillante trayectoria también en la docencia. No en vano ha dirigido decenas de tesis doctorales, ha dado más de 1.000 conferencias dentro y fuera de nuestras fronteras y participado en más de sesenta libros. Su madre, Teresa Rodríguez de Lecea, es doctora en Filosofía en la Complutense y una experta en el krausismo. También realizó una muy exhaustiva investigación sobre los filósofos españoles exiliados después de la guerra civil en la Universidad Nacional Autónoma de México.
La mayor de cinco hermanos, tiene entre sus escritoras favoritas a Almudena Grandes, como manifestó en la mencionada entrevista: «No sólo porque era una gran escritora, un ejemplo de feminismo y de compromiso social. Y además del Atleti, como yo. Fundamentalmente, porque sus novelas nos reconcilian con lo mejor que tenemos como seres humanos».
Otros detalles que descubrimos fue que le gusta cocinar y la banda sonora idónea para que el resultado sea óptimo: «Los Secretos y bastante rock de los 80. Y sí, me gusta mucho cocinar. Está mal que yo lo diga, pero los que me conocen suelen comentar que tengo buena mano con los postres». Le encanta el senderismo y dos de sus lugares favoritos para practicarlo son Doñana en primavera y la sierra de Guadarrama en cualquier momento del año. Y un enclave perfecto para veranear, Menorca.
En una entrevista concedida a Elle en 2023 hablaba de uno de los golpes más duros de su vida: «Echo mucho de menos a mi hermano pequeño. Falleció el año pasado, era muy tranquilo, curioso y le encantaba viajar. Era profesor en la universidad (...) Siempre tenías conversaciones divertidas con él, no sabías si estaba hablando en serio o en guasa, pero lo que te contaba tenía mucho sentido».
En la charla, también tuvo un momento para la nostalgia de los momentos felices en su infancia: «Había una cosa que me encantaba y era ir de paseo con mi abuelo por el campo. Me contaba los nombres de las setas, de los pájaros y de los árboles. Teníamos una relación especial. El poder disfrutar de ese tipo de diálogo cuando eres pequeña, da mucho gusto», aseguraba en la mencionada publicación femenina.
Muy discreta con su vida personal y con un brillante currículum, Teresa Ribera está casada con Mariano Bacigalupo, consejero de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, nacido en Buenos Aires, Argentina, el 13 de febrero de 1968, antes de que su familia recalara en Europa. Licenciado en Derecho por la Albert-Ludwigs-Universität de Friburgo de Brisgovia (Alemania), es funcionario de carrera y doctorado en Derecho.
Entre otros cargos, ha sido secretario general de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, director del Servicio Jurídico y Vicesecretario del Consejo de la CNE y miembro de la Sala de Recurso (Board of Appeal) de la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía de la Unión Europea (ACER).
Sobre el linaje del marido de Teresa Ribera, debemos señalar que es hijo de Enrique Bacigalupo, quien fuera magistrado del Tribunal Supremo entre los años 1987 y 2011. En un contexto muy violento en la Argentina de los años 70, decidió emigrar a Alemania, donde dio clases en la Universidad de Bonn. antes de llegar a España, donde tuvo que volver a doctorarse para la convalidación de sus estudios. Al pasar a ejercer la abogacía en el sector cumplidos los 70 años asumió la defensa de Lionel Messi cuando fue acusado de fraude fiscal.
HORÓSCOPO
Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.