La vida blindada de Unai Simón, portero de España en la Eurocopa: sueldo, polémicas y una pareja muy discreta

Unai Simón es uno de los héroes de la selección española que tanto nos ha hecho disfrutar durante la Eurocopa de fútbol de Alemania. Jugando desde los 14 años en las filas del Athletic de Bilbao, ha debido pasar por cesiones y suplencias hasta hacerse con el puesto de titular tanto en su club como en el combinado nacional que dirige Luis De la Fuente. Todo a base de discreción y sacrificio.

Un sacrificio que se hacía especialmente evidente cuando el guardameta confesaba que está jugando lesionado y que se someterá a una operación de muñeca después de la Eurocopa. Eso sí, Unai Simón asegura que la lesión no le preocupa ni le impide jugar o entrenarse con normalidad. «El tiempo que estaré de baja... lo hablaremos más adelante», dijo en rueda de prensa el futbolista nacido hace 27 años en la localidad alavesa de Murguía.

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Sumando más de 40 participaciones ya con La Roja, el ágil cancerbero se hizo con el puesto de titular en el Athletic durante la temporada 2019-20, después de que Kepa Arrizabalaga pusiera rumbo al Chelsea. En total, Simón ha jugado 195 veces para el Athletic y la temporada pasada ganó el trofeo Zamora de La Liga, que recompensa cada año al portero que tiene la mejor relación de partidos/goles encajados.

Pese a su aspecto serio, sus compañeros le describen como muy bromista y destacan su fascinación por el ajedrez. Gorka Guruzeta, delantero del Athletic, le definía en conversación con 'Relevo' como «muy casero» y «de pueblo», en el mejor sentido, antes de añadir que «tiene muy mala hostia, se enfada muy fácil en el campo porque es muy competitivo». El ariete vasco finalmente alababa de forma especial su gran personalidad: «Él no lo va a decir nunca, pero tiene todo controlado porque sabe lo bueno que es. Confía muchísimo en él».

Esa seriedad y discreción de la que suele hacer gala se demuestra también en que es uno de los pocos futbolistas de máximo nivel que no tiene perfiles en Instagram o X. En una entrevista con 'La Vanguardia' antes del partido de semifinales entre España y Francia, Unai Simón confesó que dejó las redes sociales porque le afectaban demasiado. «Luego me creía que era muy malo cuando leía lo malo o muy bueno si leía lo bueno. Así que me dije que tenía que obligarme a hacer un esfuerzo y dejarlo», valoró.

Hijo de un Guardia Civil zamorano y de una ertzaina, el guardameta añadía durante la conversación que su educación y su manera de ser nunca han ido ligados a las profesiones de sus padres y que no le gusta hablar de cosas de su vida personal. Llevando esa máxima a sus últimas consecuencias, ni siquiera conocemos la identidad de su pareja. «Tengo un grupo de amigos muy sano, al que le puedo contar cualquier problema, una novia, tengo mucha gente que me apoya», se ha limitado a asegurar el guardameta.

Sí sabemos que se preocupa por su formación y por su futuro –aunque su sueldo anual es de unos 4 millones de euros por año– y por eso está centrado en sus estudios universitarios. Aunque reconoce que no puede dedicarle todo el tiempo que le gustaría, ahora está matriculado en ADE tras probar suerte inicialmente en Fisioterapia.

Pese a su habitual discreción, el portero de la selección no ha podido evitar meterse en un campo minado a raíz de las mediáticas declaraciones de Kylian Mbappé pidiendo a la juventud que acudiera a votar en las elecciones Francesa. Cuando se le preguntó por esta cuestión, Unai Simón esquivó el tema diciendo en rueda de prensa: «Soy jugador de fútbol y de lo único que debería hablar es de temas deportivos. Los temas políticos hay que dejarlos a otras personas o entidades».

Estas palabras se hicieron rápidamente virales en las redes, donde muchos usuarios cuestionaron la ideología política del guardameta vasco. Tanto, que en una entrevista posterior para RNE quiso matizarlas.

«Al final es lo que conllevan las entrevistas o cuando te expones a los medios. Tú tienes una opinión sobre ciertos temas y lo que dije en rueda de prensa sobre la política creo que se malinterpretó un poco porque yo en ningún momento quiso contradecir a Mbappé y la gente me catalogó de fascista, yo tampoco soy fascista, pero mucha gente lo interpretó de esa manera. No era mi intención«, aseguró el cancerbero del Athletic.

El otro momento difícil que le ha tocado vivir en Alemania fue un enganchón con el periodista Fernando de Burgos tras el partido contra Alemania. Micrófono en mano, este le cuestionó sobre la «suciedad» del juego de los germanos, lo que no sentó bien a Unai Simón.

«Creo que son palabras muy duras decir que ha sido un partido sucio», dijo el portero tratando de zanjar la cuestión, pero una vez se hubo marchado, el colaborador de 'Radioestadio' le lanzó duras críticas, llamándole «marciano, lamentable y patético», llegando a desear incluso «que no venga más por aquí, que no quiero ni verlo».

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