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Tras conquistar a la audiencia con la historia del caníbal de Milwaukee y situarse entre las producciones más vistas de Netflix Ryan Murphy sigue empeñado en ponernos los pelos de punta con una serie basada en hechos que han ocurrido. Y en esta ocasión el creador de Dahmer ha apostado por una espeluznante historia real para escribir, junto a Ian Brennan, Vigilante. La nueva serie de terror de la conocida plataforma que desde hoy podemos encontrar en su catálogo.
La actriz australiana Naomi Watts, junto a Bobby Cannavale, son los protagonistas de esta sobrecogedora historia que ha conseguido hacernos sentir escalofríos solo con su tráiler. Y si a estas imágenes le añadimos que lo que nos va a contar esta serie de siete episodios sucedió en la vida real parece que el mal rato frente a la pantalla está asegurado, tal y como tanto nos gusta últimamente.
Watts y Cannavale interpretan a Nora y Dean Brannock, la versión ficticia de María y Derek Broaddus que en 2014 pagaron 1,3 millones por una casa de seis habitaciones en el 657 Boulevard de Westfield (Nueva Jersey). Con esta inversión la pareja cumplía un sueño, ella porque volvía a la ciudad en la que se crió, él porque tras nacer en una familia humilde en Maine se había convertido en vicepresidente de una compañía de seguros de Manhattan y aquel era un broche de oro para su brillante carrera con solo 40 años.
Tres días después de confirmar la compra, mientras ponían a punto la casa antes de mudarse, pintando algunas paredes y haciendo pequeñas reparaciones, encontraron en su buzón una inquietante carta con la que arrancaba la peor de sus pesadillas. «Querido nuevo vecino del 657 Boulevard, permítame darle la bienvenida al vecindario», comenzaba la misiva, que estaba mecanografiada con una máquina de escribir.
«657 Boulevard ha interesado a mi familia durante décadas y, a medida que se acerca su 110 cumpleaños me han puesto a cargo de observar y esperar su segunda venida. Mi abuelo vigilaba la casa en la década de los 20 y mi padre en la de los 60. Ahora es mi momento. ¿Conoces la historia de la casa? ¿Sabes lo que hay dentro de los muros de 657 Boulevard? ¿Por qué estás aquí? Lo voy a averiguar», decía la carta, en la que también hablaba de los trabajadores que renovaban la casa o de sus hijos, con los que la visitaron días antes.
Tras retar al lector, Derek, preguntándole quién era, y asustarle señalando que podía verle desde los coches que pasaban frente a la casa o desde las ventanas, la carta terminaba con una inquietante firma: «Vigilante». En ese momento el nuevo propietario llamó a la policía de Westfield, pero poco pudieron hacer más allá de preguntarle a Derek si tenía enemigos.
El asustado matrimonio decidió llamar a los Woods, la pareja que le había vendido su nueva residencia, para preguntarle si habían recibido algo similar mientras vivieron allí durante más de dos décadas. Y la respuesta fue afirmativa, la misiva había llegado poco antes de vender la casa y no le dieron demasiada importancia, por lo que la tiraron. Cuando los Woods y los Broaddus acudieron a la policía con aquel nuevo dato les dijeron que no se lo contasen a nadie porque su vecinos eran ahora los principales sospechosos.
Con este panorama las semanas que siguieron a su mudanza se convirtieron en un infierno. Las palabras de los vecinos, que los recibieron afablemente, eran examinadas por si se parecían a las que se utilizaban en la carta. Maria se mostraba inquieta cada vez que los niños salían al jardín y pasaban unos minutos sin saber de ellos. Uno de los contratistas descubrió que un letrero que había clavado en el patio a martillazos había sido arrancado por la noche.
Y llegó una nueva carta carta del Vigilante, en la que se jactaba de haber aprendido mucho de la familia en ese tiempo. «Han pasado años y años desde que la sangre joven gobernó los pasillos de la casa. ¿Ya has encontrado todos los secretos que guarda? ¿La sangré joven jugará en el sótano? ¿O tienen demasiado miedo de ir allí solos?» eran algunas de las frases que contenía la nueva misiva, en la que el autor reconocía que «657 Boulevard es mi trabajo, mi vida, mi obsesión. Y ahora lo es también la familia Braddus (sic)».
La pareja pospuso la fecha en la que la familia se mudaría y no volvieron a llevar allí a sus hijos. Llegó una tercera carta mientras los Broaddus trataban de descubrir al responsable de sus pesadillas. ¿Podía ser un comprador interesado en la casa al que ellos le habían robado la posibilidad de vivir allí? Instalaron cámaras en el exterior, y alarmas en el interior, investigaron a los propietarios que la casa había tenido en un siglo de historia, contrataron a un investigador privado y se compraron pastores alemanes adiestrados.
Tareas diarias como ir al supermercado se convirtieron en una pesadilla porque a ojos de Maria, que sufría terribles pesadillas, cualquiera podía ser el remitente de las cartas. Y su preocupación llegó hasta tal punto que se pasó horas investigando en internet a todos sus vecinos. Cuando el año 2014 se acercaba a su final tanto el matrimonio como el detective privado y la policía tenían clara una cosa, las vías de investigación se habían agotado. Desesperados, acudieron al sacerdote más cercano, que accedió a bendecir la casa.
A la vista del adelanto que Netflix ha ofrecido de su nueva producción esta particular pesadilla, sobre la que la web The Cut escribió un estupendo reportaje en 2018, parece lógico pensar que Murphy ha llevado hasta el extremo las situaciones vividas por los Broaddus y les habría añadido los ingredientes propios del género de terror. El resultado es una producción con la que, sumadas a los estrenos previos, el conocido guionista y productor aspira a copar todos los puestos del podio de series más vistas de Netflix.
Junto a Watts y Cannavale en el reparto de Vigilante encontramos a una de las actrices más queridas y solicitadas de los últimos tiempos, Jennifer Coolidge, la estrella de The White Lotus. Otra de las participantes será Mia Farrow que tras seis años de ausencia vuelve a ponerse frente a una cámara. Terry Kinney (¿Quién es Anna?), Michael Nouri (Devils) y el joven Luke David Blumm (The Sinner) son otros de los intérpretes que participan en una producción que dará que hablar en las próximas semanas.