Las sombras de ojos en formato cremoso son mi nuevo favorito para el verano (y seguro que para el otoño)

Soy la gran fan de las sombras de ojos y no oculto que cuento con una gran cantidad de paletas en distintos tonos: desde los más llamativos a clásicos que nunca fallan como los nudes o dorados. Pero dentro de que me introduje en esta faceta del maquillaje en las paletas, también he aprendido a apreciar las sombras de ojos en formato individual.

Una manera práctica para viajar ligera o para ir a eventos, que permite un retoque rápido mientras que destaca por su facilidad de aplicación. Además, si hay un formato que destaca y que es perfecto para principiantes, este son las sombras cremosas que, con la ayuda de un dedo o una brocha, consiguen una aplicación intensa. Descubrimos su popularidad de la mano de las maquilladoras Anita Pajares y Sonia Castro.

Las sombras en formato cremoso quizás no son las más conocidas, pero son una gran alternativa aprender a maquillarnos de manera sencilla. Explica Anita Pajares que «son una solución rápida y fácil para quienes no controlan mucho y sobre todo porque se difuminan solas, hasta con el dedo se puede hacer». La profesional destaca que otra de sus grandes ventajas es que «ahora están disponibles en formato mate o brillo». Para Sonia Castro son una gran alternativa para aquellas personas con párpados más secos o maduros, que hace que «se vean menos secos que con una sombra en polvo».

A la hora de seleccionarlos, la maquilladora explica que «en el mercado hay múltiples formatos y acabados, desde mates para looks diarios a sombras con glitter para looks más formales». Destaca que también existen «en formato tarrina o en stick y puedes encontrarlas tanto en el mundo low cost como en el de alta gama». Por su parte, Anita Pajares destaca que «los tonos son variados, pero también se pueden poner de base con una sombra en polvo y encima una en crema o al revés». La profesional menciona de ellas su «durabilidad».

¿Es necesario combinar las sombras cremosas con polvo? Sonia Castro afirma «si quieres hacerlo, adelante» y destaca «hay fórmulas muy cremosas que puede que transfieran y no se sellen por sí solas, pero la mayoría se pueden usar sin necesidad de sellarlas». Otra opción sería «hacer un look, usarlas como base o como topper con efecto metálico combinadas con sombras en polvo». Concluye que «son muy versátiles».

Por su parte, Anita Pajares recomienda «los tonos tierra, dorados y cobre» y apuesta por un look para diario con «una mate marrón de base y encima una con brillo cobre para darle un toque más elegante y sofisticado». En el caso de la maquilladora Sonia Castro, recomienda el llamado «one and done eyeshadow» que consiste en «usar un tono por todo el párpado móvil y difuminar los bordes». Concluye que de esta manera se consigue «un look de ojos sin esfuerzo para el día a día, ya sea con sombras mate o con brillo».

Dentro de las sombras cremosas estas dos opciones son muy interesantes. Una me parece perfecta para el día a día por los tonos con los que cuenta y la otra es ideal para ocasiones especiales, así como de topper de sombras en polvo para looks más elaborados. Además, ambas se pueden aplicar con los dedos o con brochas, permitiendo retocar en cualquier momento.

Overskin

Las sombras de ojos Light Vertigo son una opción cremosa para aquellas personas que son amantes del glitter y de los looks de maquillaje elaborados. Disponibles en once tonos son fáciles de aplicar y permiten modular su intensidad. Además, me parecen muy fáciles de usar, destacando la cremosidad. Tiene un precio de 23 euros.

A favor

- Hay algunos tonos que se pueden utilizar como iluminadores en la zona de pómulos, arco de la ceja o mejillas. Es un producto muy versátil.

- Deja la piel con un acabado fresco y duradero. Destaca por la comodidad de aplicación.

- Me encanta porque sus tonos son muy originales y permiten crear looks de maquillaje tanto para el día a día como más arriesgados.

En contra

- Si es tu primera aproximación a las sombras de ojos cremosas, quizás es demasiado glitter para ti.

Kiko Milano

La opción de la firma de maquillaje italiano se llama Lasting Mousse Eyeshadow. Una sombra de ojos cremosa, con efecto perlado y muy fácil de aplicar. Destaca por su duración de hasta 16 horas que permite usarla tanto en días de oficina como en eventos más especiales. Su precio es de 11,99 euros.

A favor

- Su relación calidad precio es perfecta, consiguiendo un acabado impecable en párpados con tendencia seca.

- Está disponible en siete tonos que van desde los más clásicos a atrevidos como el bronce, el verde o el violeta.

- Me encanta su alta pigmentación que permite en una sola pasada conseguir un color duradero e intenso. Funciona tanto con brocha como aplicada con el dedo.

En contra

- En párpados más grasos puede acabar transfiriendo, por lo que recomiendo aplicar una prebase de sombras.