Los mejores suplementos para una melena fuerte en otoño a los 50

Con la llegada del otoño es habitual notar una mayor caída del cabello. Este fenómeno estacional se acentúa con la edad y, especialmente, a partir de los 50 años, cuando los cambios hormonales, el estrés y el propio paso del tiempo hacen que la melena pierda densidad y fuerza.

En esta etapa, los suplementos pueden convertirse en grandes aliados para reforzar el cabello desde el interior. A los 50, la disminución de estrógenos propia de la menopausia afecta directamente al ciclo de crecimiento capilar. El folículo se vuelve más frágil y el cabello nace más fino. Además, la absorción de ciertos nutrientes se reduce con la edad, lo que puede agravar la pérdida de vitalidad. Por eso, más allá de un buen champú o sérum, es clave aportar desde dentro los nutrientes que necesita el cabello para mantenerse sano.

Entre los suplementos más recomendados se encuentra la biotina o vitamina B7, esencial para la síntesis de queratina, la proteína que compone el cabello. También el colágeno hidrolizado, que fortalece la estructura capilar y mejora su elasticidad, y el ácido hialurónico, que ayuda a mantener la hidratación del folículo. Sin olvidar el zinc y el hierro, dos minerales cuya carencia está directamente asociada a la caída del pelo.

Las vitaminas del grupo B, especialmente la B6 y la B12, junto con la vitamina D, tienen un papel fundamental en el crecimiento del cabello. Un déficit en estas vitaminas puede ralentizar el ciclo capilar y dar lugar a una melena apagada y sin volumen. Por eso muchos suplementos específicos combinan varios de estos nutrientes en una sola fórmula.

En farmacias y parafarmacias ya es posible encontrar nutricosméticos de referencia, que incluyen complejos de vitaminas, minerales y antioxidantes diseñados para frenar la caída y devolver vitalidad al cabello. Se presentan en cápsulas, polvos solubles o incluso gominolas, lo que facilita la constancia en su consumo.

Eso sí, conviene recordar que los suplementos no son una solución inmediata: los resultados empiezan a notarse pasados al menos tres meses de uso continuado. Por eso, lo ideal es comenzar en otoño, cuando la caída estacional es más evidente, y mantenerlos durante toda la temporada.

Junto con los suplementos, algunos hábitos ayudan a reforzar la melena. Los masajes capilares activan la circulación sanguínea y estimulan el folículo; reducir el uso de planchas y secadores evita la rotura; y apostar por una dieta rica en proteínas, frutas, verduras y ácidos grasos omega-3 es clave para mantener la salud capilar.

Antes de incorporar cualquier suplemento es importante consultar con un médico o farmacéutico, especialmente si se están tomando otros medicamentos o existen condiciones de salud previas. Una valoración profesional garantiza que el tratamiento sea seguro y efectivo.

Nunca es tarde para cuidar el cabello. Con los suplementos adecuados, una rutina capilar suave y una alimentación equilibrada, es posible lucir una melena fuerte, con brillo y vitalidad a los 50 y más allá. Porque el paso del tiempo se nota, pero también se puede acompañar con los mejores aliados de la nutricosmética.