Cáncer de vejiga: así son el diagnóstico y las claves médicas del tumor que padecía Jesús Mariñas

El popular periodista del corazón llevaba meses luchando contra un cáncer de vejiga que debe ser detectado a tiempo para tener garantías de éxito.

Tamara Vila
TAMARA VILA

El popular periodista Jesús Mariñas ha fallecido a los 79 años víctima de un cáncer de vejiga que le obligó a permanecer ingresado desde el pasado mes de marzo en un hospital madrileño. Su muerte se produce cuando ni siquiera ha transcurrido un año desde el fallecimiento de Mila Ximénez, otra figura vinculada a la prensa rosa que también murió a causa de un tumor, en su caso localizado en el pulmón. Como ocurrió con la ex de Carlos Santana, el cáncer que se llevó a Mariñas también poseía un difícil pronóstico porque ya se encontraba en etapas avanzadas.

El cáncer de vejiga afecta mucho más a hombres que a mujeres: lo padece uno de cada 25 varones, mientras que su prevalencia desciende a una de cada 90 en el caso de las mujeres. Se estima que en 2022 se diagnosticarán 22.300 nuevos casos de cáncer de vejiga en nuestro país, una cifra que convierte a este tumor en el quinto con mayor incidencia en España.

¿Qué es el cáncer de vejiga?

La vejiga, un órgano hueco en la parte inferior del abdomen, sirve como depósito para la orina hasta que se expulsa a través de la uretra. La casi totalidad de los cánceres de vejiga comienzan en las células de transición, que ocupan el revestimiento más interno de la pared de la vejiga. El cáncer se origina en estas células que recubren la vejiga y pueden invadir cualquier capa de ese área.

¿Cómo se desarrolla el cáncer de vejiga?

Cuando se detecta, el cáncer de vejiga puede estar en una etapa temprana o ser ya invasivo, cuando ha atravesado la pared de la vejiga y posiblemente ha alcanzado órganos o ganglios linfáticos cercanos. En las etapas iniciales, el cáncer está confinado al revestimiento de la vejiga o al tejido conectivo justo debajo del revestimiento, pero no ha invadido la pared muscular principal de la vejiga. Es bastante más fácil y efectivo actuar sobre él.

Las etapas II a IV denotan cáncer invasivo. Así, en la etapa II el cáncer se diseminó a la pared muscular de la vejiga. En la fase III, el tumor ya se agregó al tejido adiposo fuera del músculo de la vejiga. Y en el estadio IV, el cáncer ha hecho metástasis desde la vejiga a los ganglios linfáticos o a otros órganos o huesos.

¿Cuáles son los síntomas?

Algunos síntomas del cáncer de vejiga también son síntomas de otras afecciones (una cistitis, por ejemplo) y por eso es importante acudir a un especialista cuanto antes. La sangre en la orina es la señal de advertencia más importante de todas. También puede ocurrir que exista un dolor al orinar, micción frecuente o cierta dificultad para expulsar la orina.

A pesar de que es un tumor frecuente, la mortalidad es relativamente baja. «En este sentido, el manejo multidisciplinar de la parte quirúrgica, de la parte de radioterapia y de la parte del tratamiento sistémico o tratamientos intravesicales son imprescindibles», explica el Dr. Enrique Grande, jefe del Servicio de Oncología Médica de MD Anderson Madrid. «Las opciones para el paciente crecen, las opciones para preservar la vejiga son mayores y las opciones para curar al paciente aumentan si el centro ofrece todo el abanico de especialistas en torno al tumor», sostiene el especialista.

Por supuesto, existen factores de riesgo. El primero, como se ha señalado, es el del sexo de la persona, pues afecta mucho más a hombres que a mujeres. Pero, como muchos otros tumores, también influye el estilo de vida. Así, el tabaquismo es otro de los factores que más influye en la prevalencia del cáncer de vejiga al hacer que se acumulen sustancias químicas en la orina.

El riesgo de este tumor aumenta si hay antecedentes familiares y también hay una fuerte relación con la edad. Aunque puede ocurrir en cualquier momento de la vida, la mayoría de las personas diagnosticadas con cáncer de vejiga son mayores de 55 años. Y otras causas, aunque en menor medida, pueden ser la exposición a ciertas sustancias químicas, haberse sometido a tratamientos oncológicos previos o haber padecido infecciones o inflamaciones de las vías urinarias crónicas o repetidas.

¿Cuál es el mejor tratamiento para un tumor en la vejiga?

Si se notan algunos de los síntomas señalados, por leves que sean, es fundamental acudir pronto al médico. Cogerlo en su fase inicial contribuirá notablemente a un mejor pronóstico y cura. Será preciso hacer un análisis de orina para determinar si una infección podría ser la causa de sus síntomas. Un examen microscópico de la orina, llamado citología, buscará células cancerosas.

Una cistoscopia es el procedimiento principal para identificar y diagnosticar el cáncer de vejiga. En este procedimiento, se inserta un telescopio iluminado (cistoscopio) en la vejiga desde la uretra para ver el interior y tomar muestras de tejido (biopsia), que luego se examinan bajo un microscopio para hallar signos de cáncer.

Si se realiza el diagnóstico de cáncer de vejiga, el siguiente paso es controlar y extirpar el tumor. El procedimiento depende por completo de la etapa en la que se encuentre el cáncer. Puede ir desde una simple citoscopia si se coge a tiempo hasta una cistectomía o la quimioterapia en fases más avanzadas. En este caso, el pronóstico ya es más difícil, como ha ocurrido en el caso de Jesús Mariñas.

21 de marzo-19 de abril

Aries

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