MUY UNIDAS
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Cuando Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover se separaron oficiosamente, porque nunca lo comunicaron y, de hecho, no están divorciados, su única hija en común tenía 10 años. Ernesto y Carolina se habían casado el 23 de enero de 1999 y el 20 de julio nacía la princesa Alexandra de Hannover, que en la actualidad está adquiriendo cada vez más relevancia social. Las fechas hablan por sí solas: la princesa Grimaldi estaba embarazada cuando se casó por tercera vez
El matrimonio de Carolina de Mónaco vino precedido del escándalo de la ruptura de Ernesto de Hannover y su primera mujer, Chatan Hochuli, madre de sus dos hijos mayores, Ernesto Augusto de Hannover, con quien mantiene una guerra sin cuartel, y Christian de Hannover que vive en Madrid, como él, con su mujer, la peruana Sassa de Osma. Recordemos que hasta entonces Chantal y Carolina eran íntimas.
Una vez que sus padres se separaron, no se volvieron a ver imágenes de Alexandra de Hannover con su padre y a día de hoy sigue siendo una incógnita cómo es su relación. Recientemente estuvo en Madrid y se desconoce si lo llegó a visitar, en un momento muy delicado de salud para él, pues ha estado ingresado en diversas ocasiones en la clínica Ruber de Madrid.
La prensa alemana mantiene que Alexandra y Ernesto de Hannover se suelen ver en secreto, pues quieren que su relación escape al radar de los medios de comunicación. Una tesis muy poco plausible, porque Ernesto sí se deja fotografiar con su hijo Christian, con quien sí mantiene una buena relación, al igual que su novia, Claudia Stilianopoulos, hija de Pitita Ridruejo y el embajador Mike Stilianopoulos.
Alexandra de Hannover creció sin la figura paterna al lado, lo que supuso que Carolina tuviera que estar particularmente unida a él. Sus tres hermanos, Andrea, Carlota y Pierre Casiraghi, también se quedaron huérfanos siendo muy niños, pues su padre, Stefano Casiraghi murió en un accidente de off-shore en la bahía de Montecarlo el 3 de octubre de 1990, pero crecieron juntos.
Hasta los últimos años, Alexandra de Hannover había sido, por así decirlo, eclipsada por la popularidad de sus hermanos, siempre presentes, pese a ser muy discretos, en la crónica social. Bajo la supervisión de su madre, Carolina de Mónaco, la joven princesa ha ido labrando su camino.
Una decisión trascendental fue cuando en 2018 decidió abandonar la fe luterana y convertise al catolicismo. Un gesto simbólico que la apartaba de su padre y también de la línea sucesoria a la corona británica a la que por su linaje tenía derecho. Eso sí, en posiciones muy relegadas. En ese momento, de hecho, se encontraba en la posición 411.
Sea como fuere, es la más royal de sus hermanas. Así, podemos decir que es la princesa Alexandra Carlota Ulrica María Virginia de Hannover, duquesa de Brunswick y Luneburgo y princesa de Gran Bretaña e Irlanda, aunque estos países son repúblicas. El tratamiento de Su Alteza Real es usado en Mónaco o por cortesía en cualquier otro lugar del mundo.
Alexandra de Hannover mantiene una relación sentimental muy estable con Ben Sylvester Strautmann y, además, se ha licenciado recientemente en la sede de la Universidad de Princeton en París. Con un Instagram que antes era prácticamente secreto, y una presencia cada vez mayor en actos públicos, generalmente vestida de Chanel, firma a la que tiene mucho apego la familia Grimaldi, la princesa va a por todas.
HORÓSCOPO
Como signo de Fuego, los Sagitario son honestos, optimistas, ingeniosos, independientes y muy avetureros. Disfrutan al máximo de los viajes y de la vida al aire libre. Son deportistas por naturaleza y no les falla nunca la energía. Aunque a veces llevan su autonomía demasiado lejos y acaban resultando incosistentes, incrontrolables y un poco egoístas.