AMOR DE MADRE Por qué la infanta Sofía es la protegida de la reina Letizia (y cómo es en las distancias cortas): lo analizamos con expertos

La relación entre doña Letizia y la infanta Sofía ha sido siempre muy cercana. Para muchos, la reina se ha preocupado mucho para que la hija menor no se sintiera nunca desplazada. ¿Cómo? Lo analizamos con dos expertos.

La infanta Sofía, junto a su madre, la reina Letizia. / GTRES

Javier Díaz de Lezana
JAVIER DÍAZ DE LEZANA

Hace unos meses, la prensa alemana hablaba de la personalidad de la infanta Sofía en estos términos: «La hermana pequeña de la heredera al trono (la princesa Leonor) es en realidad bastante tímida y reservada». Y no le faltaba razón, pero tampoco acertaban nuestros colegas germanos en la descripción sobre cómo es la hija menor de los reyes Felipe y Letizia. Lo que desde fuera puede interpretarse como timidez, desde dentro podría ser una cuestión de protocolo y prudencia. Aquello de pecar por defecto más que por exceso.

Este 2023 va a ser un año de grandes cambios para la menor de las Borbón Ortiz: el más importante, sin duda, su viaje a Gales para estudiar en el mismo colegio en el que lo hace su hermana. Será entonces cuando Sofía alce el vuelo, abandone el nido y comience una nueva vida lejos de Zarzuela. Lejos de sus padres. Lejos de la reina Letizia.

Porque ha sido ella la que durante estos años se ha encargado de que la infanta no quedara en ningún momento eclipsada por el papel (y el peso institucional) de la princesa. Y lo ha conseguido. Y tal vez, ese papel secundario ha posibilitado que Sofía, lejos de ser la niña tímida de la que hablaba el medio alemán, sea la más lanzada de las dos.

Al menos, así lo corroboran aquellos cuya rutina laboral consiste, entre otras tareas, en seguir a la familia real allá por donde se desplazan (hoy Palma, mañana Asturias, pasado Girona). Jose Gegúndez, fotógrafo especializado en la agenda real y que lleva más de una década retratando a los reyes (y su familia) en distintos eventos, viajes y recepciones, describe a la infanta como la más atrevida y accesible de las hermanas. «Es más extrovertida que Leonor, aunque es verdad que nunca las vemos en un escenario libre, así que es complicado que actúen de forma natural», nos cuenta.

Desde el entorno de la Fundación Princesa de Girona, premios que cada año entrega la princesa Leonor y que cuenta con la asistencia del resto de la familia real, comparten la misma opinión: «Es súper simpática y todo el cuerpo de seguridad la adora», explican.

Los reyes Felipe y Letizia con sus hijas en la Ofrenda del Apostol en Santiago de Compostela. / gtres

Las apariciones de Felipe y Letizia, solos o con sus hijas, forman parte de una coreografía protocolaria perfectamente ensayada: discursos, besamanos, actos oficiales, baños de multitudes… Hasta esas salidas, aparentemente improvisadas, (una tarde por Palma, una noche en la Ópera, un cine en VO...) pertenecen a un programa anteriormente testado y aprobado. Y ahí es donde se ve la mano de Letizia sobre sus hijas y especialmente sobre la menor, Sofía.

«Las educan igual, y Letizia, en cada evento, procura que ambas tengan la misma presencia», explica Gegúndez. «Leonor tiene devoción por su padre, Sofía también, aunque se nota menos».

Es relativamente sencillo percibir el afán de la reina por 'amparar' de una manera especial a su hija menor. No hay más que poner un poco de atención a las fotografías y los vídeos en los que los cuatro miembros de la familia real hacen acto de aparición. Es verdad que, por protocolo, la heredera debe aparecer junto al rey, mientras que la infanta se sitúa junto a su madre. Cierto es también que es la princesa Leonor la que tiene un protagonismo institucional por el cargo que ocupa, de ahí el especial mimo con que la reina se ocupa de que la segunda no se quede fuera de plano: « Siempre está pendiente de que esté delante, que no se quede rezagada en la foto final», explica el fotógrafo.

Cómo es la infanta Sofía y cuáles son las diferencias con su hermana Leonor

Uno de los momentos más viralizados de aquel vídeo que ofreció la Casa Real coincidiendo con el 50 aniversario del rey Felipe fue el bautizado como 'momento sopa'. Los reyes y sus hijas se sentaban en torno a una mesa (en Zarzuela) a degustar una plato de este alimento y la imagen captaba el gesto picarón y divertido de la infanta a punto de beber un vaso de agua. Una mueca que dio pie para muchos memes. Fue en ese momento cuando la pequeña ejecutó, involuntariamente, un pequeño sorpasso.

Una escena del vídeo que la Casa Real española publicó coincidiendo con el 50 cumpleaños del rey Felipe VI. / casa real

Excepto ese pequeño instante de espontaneidad, el resto de la escena rezumaba cierta rigidez, la que suele imperar en las apariciones de la familia. Naturalidad hasta cierto punto, cercanía pero manteniendo las formas. Cristian Salomoni, Experto en Comunicación no verbal, ha analizado lo que dicen los gestos de la reina para con su hija.

«Letizia tiene fama de ser muy estricta y controladora con su hijas en cuanto a su formación y en cuanto al protocolo», explica Cristian, «pero con la menor es un poco más flexible, ya que en la Princesa Leonor recae el futuro de la corona. Por eso la vemos muchas veces pendiente de Leonor explicándole y dirigiéndola durante las visitas y eventos oficiales… Con Sofía es algo más informal. Digamos que se ve que es menos exigente, pero esto no significa que la deje en un segundo plano».

En algunas ocasiones, especialmente en el último año, esa conexión se ha visto más potenciada. «Desde que Leonor se ha ido a estudiar a Gales, se ve como Sofía está coordinada con su madre, se ponen incluso ropa parecida», comenta Cristian. En el último desfile de las fuerzas armadas para conmemorar el Día de la Hispanidad, hay un momento en el que Sofía se acerca a su madre para pasarle el brazo por la espalda. La reina, recoge esa mano y la agarre durante unos segundos.

«Es un bonito gesto donde dejan ver que se quieren y que a pesar de la ausencia de la princesa, ella esta allí apoyando a la familia y a sus deberes institucionales».

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